El mayor conflicto normativo del Proyecto Especial Chinecas, ocurre no en La Pampa La Carbonera, infestada de invasores, sino en la zona agrícola de Cahuide, Santa Rosa e incluso hasta Pampa el Toro, por la sencilla razón que hasta el momento después de más de dos década, es imposible titular zonas agrícolas altamente productivas.
Así se deduce de la conversación sostenida con el dirigente de la Junta de Usuarios de Irchim Romel paz Ninaquispe. Esa ausencia de marco normativo de Chinecas originó un conflicto con la Dirección Regional Agraria y donde hubo de por medio hasta anulación de partidas electrónicas y títulos inscritos en SUNARP.
El problema hasta hoy no encuentra solución e incluso hace algunas semanas atrás Chinecas hizo público el saneamiento físico legal de las tierras donde se encuentra el poblado de Cahuide, pero esa zona es diferente a las tierras agrícolas que sigue en situación de hace más de 15 años atrás. Sin duda hay conflicto, pero soterradamente y con tierras agrícolas que no se titulan.
“Recordemos que las primeras tierras invadidas fueron en Pampa El Toro y aún existe conflicto entre el Proyecto Chinecas y el Ministerio de Agricultura a cargo de las Direcciones Regionales de Agricultura y no pueden formalizar a los agricultores de Santa Rosa, Cahuide, Chachapoyas y parte de Pampa el Toro, las tierras de Pampa el Toro los posesionarios que fueron cancelados sus partidas en Sunarp, por Resolución Ministerial”, señala Paz Ninaquispe
Agrega, “Cabe señalar que los posesionarios entre 6 de ellos comenzaron a regar desde el año 2002. Al terminarse el tramo del Canal a Nepeña, la empresa San jacinto siembra caña y en el 2003 apertura la toma de captación 5 para los usuarios formales del comité Chachapoyas y aprovecharon en tomar los terrenos para sembrar los 27 posesionarios que fueron cancelados sus partidas electrónicas y irregularmente les condicionan para venderlos mediante la Ley 27887 que obliga a que sea beneficiarios de la venta directa siempre que estén en posesión antes del 28 de Julio del 2001, hecho que ellos no alcanzaban”, reitera y enfatiza que esa ley es para tierras de todos los proyectos especiales, no necesaria mente para Chinecas. Aquí los invasores quieren su ley de invasores de Chinecas, señala.
Preguntamos sobre el asunto actual donde Chinecas y el Midagri gestionan la titulación mediante el convenio para los agricultores de 5, 7 u 8 hectáreas, pero hay otros que tienen mas de 40 hectáreas para arriba.
“Lo bueno es que a ellos no les alcanzará, porque de darse su pedido afectaría a las tierras de los otros proyectos y afectara a Chinecas su viabilidad, que sinvergüenzas, que compren en subasta pública sin privilegios de invasores”, puntualizó.
DESMEMBRAR
Paz Ninaquispe, manifiesta que ha habido intentos para solucionar ese problema pero no se han concretado y esos intentos fueron realizados por el finado dirigente agrario Félix Cusma. Es decir, desmembrar esos terrenos que Chinecas señala que son suyos y afectan a los que la Dirección Agraria habían titulado y si no se ha concretado es porque Chinecas no tiene el marco normativo para hacerlo. Es una lástima, pero el tiempo pasa y todo sigue igual.
LA CULTURA QUE IMPERA
Sobre la situación del agua, el dirigente de Irchim puntualiza, “Si las tierras que les otorguen a otros grupos de invasores a 8 hectáreas que harían si no hay agua, porque ahora, hay un grupo que compraron a Guzmán Aguirre algo de 109 hectáreas, hasta hoy no tienen definidos su licencia de agua, así como del grupo Remanso, tierras que le invadieron a la Empresa SOLIMANA que al verse invadidos los vendió a sus invasores, esa cultura impera. Nosotros del área de Mejoramiento y las áreas antiguas nos vemos afectados por el robo de agua”, afirma.
Esa zona de las 109 hectáreas es la que hoy se conoce como Nuevo Jerusalén, que no cuentan oficialmente con licencia de agua.