Editorial

Asesoría necesaria y bien recibida

Todo asesoramiento que apunte a prevenir errores, tanto en la gestión como en la ejecución de una obra pública, siempre será necesario y muy bien recibido. Con mucha mayor razón si este favor viene con la mejor buena voluntad de parte de organismos e instituciones que poseen una larga y acreditada experiencia en gestión pública. La presencia de numerosas obras paralizadas o mal ejecutadas que abundan a nuestro alrededor, nos recuerda que, en vez de corregir errores, lo mejor es evitarlos. El tiempo y el dinero que se pierde con estas obras, es algo que nunca se recupera.

Decimos esto a raíz del anuncio que ha  hecho el alcalde de Nuevo Chimbote, Walter Soto Campos, con relación al asesoramiento técnico que ha ofrecido brindar la agencia estatal Pro Inversión en el proceso de gestión y ejecución de los proyectos para la construcción de un nuevo Palacio Municipal y un Polideportivo.

Este apoyo  ha sido concertado luego de una reunión que el alcalde Walter Soto ha sostenido con el director ejecutivo de Pro Inversión, José Salardi Rodríguez, en la ciudad de Lima. Y, para que no quede la menor duda acerca de este ofrecimiento, la  próxima semana estará llegando a Nuevo Chimbote un equipo de técnicos de Pro Inversión para cumplir con este propósito.

De por sí, la noticia conlleva una especial connotación. Solo en la provincia del Santa existen obras paralizadas y abandonadas precisamente por haber sido mal gestionadas y peor ejecutadas. Según los informes de la Contraloría General de la República, todas ellas han hecho tabla rasa del Reglamento Nacional de Edificaciones y de las disposiciones de OSCE y SEACE.  Se estima en más de 400 millones de soles el importe de estas obras, que se mantienen trabadas y paralizadas. De haber sido gestionadas y ejecutadas en forma correcta, otro sería el resultado.

Y donde también es imprescindible hacer una reflexión, es ante el anuncio de que las obras que se proyectan ejecutar en Nuevo Chimbote se harán bajo la expectante modalidad de obra por impuesto. Esta modalidad pone a prueba no solo la correcta gestión de una obra pública, sino también la credibilidad y el prestigio del organismo que hace las veces de unidad ejecutora.

Por consiguiente, una buena asesoría en indispensable para la correcta ejecución de una obra; desde la formulación del perfil, pasando por la elaboración del expediente técnico, la convocatoria del proceso de adjudicación y la misma ejecución de la obra. Correcta gestión.