Opinión

La literatura bíblica si puede cambiar el mundo

CÉSAR VILLÓN RUÍZ

El escritor Salman Rushdie, escritor Británico Estadounidense de origen indio, afirmó que la literatura “no puede cambiar el mundo”, en este mundo de la mentira, donde predominan las falsas narrativas. Cambiar el mundo a través de la Literatura no se puede, es muy raro que un libro tenga un efecto directo en el hombre, cuando nos vemos ante el horror y la atrocidad, ¿Cómo puede la literatura afrontarlo?” Es la pregunta y la respuesta que se da a sí misma el escritor Rushdie; Mi respuesta como escritor a Salman Rushdie: en literatura llámase Escritor al novelista, poeta, historiador, y otros. Siempre corren el riesgo de cometer un lapsus a la equivocación o falta dada al escribir a la verdad, por ejemplo: Lapsus calami, errar al escribir. Lapsus lingual, errar al hablar. Lapsus mentís, errar al mentir. No olvidemos que el primer libro que se imprimió fue la Biblia; gracias a Johames Gutenberg, Alemán (1394-1468) inventó la imprenta e imprimió la Biblia como el primer libro en el año 1455. Entonces me pregunto y digo que la Literatura Bíblica si puede Cambiar el Mundo. La Biblia nos manifiesta con maravillosa claridad el poder que tiene la palabra. Evitemos hablar demás y nuestras respuestas serán sensatas, concreta y correcta. Recordemos que la palabra tiene mucho poder. Tratemos de permanecer en silencio, o actuar con inteligencia amorosa. La palabra es la forma en que los seres humanos se comunican exponiendo sus pensamientos, sentimientos y deseos. Muchas veces nuestras palabras no reflejan lo que actualmente sentimos y creemos. El verbo es la energía que usó Dios con su profundo Amor para crear y mantener en armonía el universo. La lengua es un órgano mas pequeño de nuestro cuerpo sin embargo es uno de las más poderosos y activos. La lengua puede ser la cosa más hipócrita del mundo. También es imposible que de una boca que alaba a Dios salgan palabras que dañen su obra. Y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor para Gloria de Dios Padre. El deber de una persona sabia es vigilar sus propios labios. El escritor que cree en Dios y lee su palabra en la Biblia tiene sabiduría. La sabiduría es la facultad de saber cómo hemos de vivir en este mundo y esta vida en vista de que estamos de paso hacia otro mundo y otra vida. Es el entendimiento de que voy a tener que rendir cuenta de mis actos ante un juez imparcial ante quien no prescribe las trasgresiones. Ese temor de Dios es el principio de la sabiduría, es decir, su origen y causa. Tener temor de Dios, quiere decir no depender de la propia prudencia ni ser autosuficiente, sino fiarse y depender de Dios. Ser un buen escritor primordialmente es la Educación, que es la luz de los conocimientos en la vida material como espiritual, enriqueciendo los valores y la cultura en general. Querido lector (a), escritor que no lee la biblia, sus lectores, nunca se sentirán satisfechos en Su medio social con su prójimo sintiéndose indiferentes los unos con los otros, es por eso que estamos como estamos en un mundo en conflictos. La Biblia, no hay como las Escrituras para enfrentarse a las complejidades de nuestro Orden Social. Vivimos en un medio cada vez más intrincado y difícil. Somos parte de un mundo de seres humanos cuyo código de conducta es contrario a todo lo que Cristo a proclamado. Vivir con gente así es estar siempre expuestos a enormes tentaciones de toda suerte. El escritor que escribe sus artículos en los periódicos sobre cualquier situación, social, Político, económico, no los compara como ejemplos que están escritos en la Biblia, nunca cambiaría su estatus social. Como ejemplo, también tenemos a los políticos, que en su gobierno nunca mencionan a Dios, porque en su corazón y conciencia gobiernan para enriquecerse actuando contra las leyes y, terminando bien fugan o en la cárcel. Querido lector (a), leer la Biblia es cambiar nuestra conducta social, porque sus mandamientos es para vivir en paz y armonía en nuestro mundo. Leer los proverbios de la Biblia, Dios nos dice: “Hijo mío no te olvides de mi ley, y tu corazón guarde mis mandamientos”. Queridos escritores el ejemplo de la palabra de Dios nos aconseja en la Biblia y dice: “Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, Reprender, enmendar e instruir en Justicia” 2Titomoteo cap. 3:16 Amén.