Editorial

32 millones al bolsillo de la corrupción

Solo entre enero y junio del 2024:

Esto es algo de nunca acabar. Cada informe de la Contraloría General de la República con relación  a la ejecución de obras y la contratación de servicios que realizan las diversas instituciones públicas de la región Ancash, es para ponerse a llorar. Que se sepa, hasta hoy ninguno de estos informes de control ha sido  motivo para resaltar la labor de dichas instituciones. Por el contrario. Lo que revelan estos documentos, con el mayor lujo de detalles,  son irregularidades de todo calibre que se producen en el manejo de fondos públicos pero que, aún así, la mayoría de estos delitos en agravio del estado se mantiene en la más descarada impunidad.

En una conferencia de prensa ofrecida por el gerente regional de la Contraloría de Ancash, Emerson Rucoba Tananta, se ha dado a conocer, con videos a la vista y documentos a la mano, que solamente entre enero y junio del 2024 se ha comprobado  en forma fehaciente el uso irregular de 32 millones de soles en manos de las diversas entidades públicas que operan en la región Ancash.

Por desgracia, ésta no es ninguna primicia. Es la suma de todas las irregularidades  que diariamente  denuncia la Contraloría y que con esa misma frecuencia damos a conocer a través de nuestras páginas. Una retahíla de revelaciones de corrupción que ha pasado a formar parte del folklore doméstico regional.

Como responsables  de este delictuoso manejo de fondos públicos, la Contraloría ha identificado plenamente a un total de 308 funcionarios, de los cuales 248 enfrentan responsabilidad penal.  Todo indica que, a pesar de las incontables promesas y repetitivos  juramentos que se hace con relación a la contratación de servidores supuestamente probos y honestos, el gobierno regional y las municipalidades provinciales y distritales de la región,  se esmeran en seguir contratando al gato como despensero. Los resultados hablan por sí mismos.

Pero ahí no queda todo. El titular del órgano regional de control ha hecho una comparación bastante ilustrativa, pero que al mismo tiempo es motivo de inmensa pesadumbre para los ancashinos. Los 32 millones de soles que han ido a parar a bolsillo de la corrupción solo en el primer semestre del 2024, equivale al 88.8 por ciento de los 36 millones que han corrido la misma suerte a todo lo largo del 2023. Eso quiere decir que la corrupción se mantiene en franco e imparable aumento. En caso de subsistir esta tendencia, se da por descontado que, por tercer año consecutivo, la región Ancash continúe encabezando el record nacional de corrupción. ¿Puede ser esto motivo para celebrar en grande y sacar pecho?.

Como ya lo hemos dicho cada vez que nos ocupamos de este tema, es causa de más de una preocupación que los informes de la Contraloría se hayan convertido en papeles que se lleva el viento no que sirven para otra cosa. Ni la Procuraduría ni la Fiscalía Anticorrupción del Santa, que están facultadas incluso actuar de oficio, se dan por enterados, ni mucho menos se toman el trabajo de revisarlos.  Mismo Pilatos. ¿Qué más pueden desear los miles de funcionarios involucrados en estas denuncias? ¿Cuántos millones más irán a parar al bolsillo de la corrupción en el segundo semestre del 2024?.