Alerta:
Este año se registraron 40 incendios forestales en diversas zonas de la región Áncash, la mayoría ocasionada por la mano del hombre, informó el Centro de Operaciones de Emergencia Regional (COER).
La provincia del Santa ha sido la más afectada, pues, ha soportado 10 incendios forestales; seguida de Huaraz y Yungay, donde ocurrieron 7 y 5 emergencias, respectivamente. El fuego ha dañado 305 hectáreas de pastos naturales, 20 hectáreas de cultivo y 2 hectáreas de bosques. En tanto, 114 personas sufrieron los estragos de los incendios y 6 viviendas resultaron perjudicadas.
En los últimos días ocurrieron diversos incendios. En el centro poblado Santa Casa, en Huaraz, un grupo de pobladores quemaron arbustos para hacer construcciones, lo que generó una emergencia. Poco después, ocurrió otro siniestro de grandes proporciones en el centro poblado Monterrey, que destruyó cinco hectáreas de vegetación y plantas silvestres.
En tanto, 1,500 metros cuadrados de cultivos de trigo y 25 hectáreas de cobertura natural fueron quemados en Yungay y en San Luis, una hectárea de árboles frutales y 7 hectáreas de cobertura natural.
En la zona sierra de la región, estas emergencias son atendidas por el Grupo de Intervención Rápida (Gired) del Gobierno Regional (Gore) de Áncash, un equipo especializado que arriesga su integridad para sofocar el fuego que genera un grave daño al medio ambiente y, en muchos casos, pone en peligro a la población.
El jefe de la Oficina Regional de Gestión de Riesgo de Desastres, Rafael Macedo Menacho, mencionó que la mayoría de estos incendios lo ocasiona la mano del hombre, sin importar el grave impacto que genera a las áreas naturales.
“Se recomienda no encender fogatas en zonas de pastizales; evitar arrojar basura, materiales inflamables y objetos encendidos en carreteras y caminos; tampoco tirar vidrios, botellas, desperdicios ni cualquier tipo de material combustible”, exhortó.
El Coer Áncash recordó que una persona que provoca un incendio forestal puede ser sentenciada de 4 a 6 años de cárcel y a la prestación de servicios comunitarios de 40 a 80 jornadas; además, se le sanciona con una multa proporcional al daño causado. (Andina)