En la mañana del sábado 13, la bahía de Sechura se despertó con una sorpresa inusual: dos imponentes barcos pesqueros que enarbolan el pabellón de China amanecieron anclados muy cerca del puerto de Bayóvar.
Los gigantes de acero, identificados como JiaDe18 y Hai Feng 1, con bodegas de 965 y 488 toneladas respectivamente, han permanecido en extensas jornadas de pesca.
El primero lleva aproximadamente seis meses en altamar, mientras que el segundo ha estado operando por casi un año, según consta en los registros de Starboard Marine Intelligence, una plataforma que rastrea en tiempo real la posición de estos barcos utilizando datos satelitales del sistema de anticolisiones AIS que estos barcos tienen.
Este inesperado avistamiento cobra relevancia debido a que, según la institución que regula su actividad en la región (i.e., la Organización Regional de Ordenación Pesquera del Pacífico Sur, OROP-PS), el Puerto de Bayóvar no está autorizado para recibir barcos de bandera extranjera que pescan pota en altamar, como sí lo son los puertos de Paita, Chimbote, Trujillo y Paracas, entre otros.
Alfonso Miranda, presidente de CALAMASUR, subrayó que este es un hecho sin precedentes y representa un incumplimiento de los compromisos de Perú en el marco de la Medida de Conservación y Manejo CMM 07 de la OROP-PS y el Acuerdo sobre Medidas del Estado Rector del Puerto.
“El ingreso de naves extranjeras que operan en aguas gestionadas por la OROP-PS a un puerto no designado para tales fines incluso podría conllevar a una potencial ausencia de inspecciones a estas embarcaciones. Definitivamente, es un hecho que vulnera las normas internacionales y los acuerdos establecidos para prevenir la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (INDNR)”, manifestó.
Agregó que este tipo de negligencias compromete la integridad de los esfuerzos globales para la sostenibilidad de las pesquerías y la aplicación de las Medidas del Estado Rector del Puerto, esenciales para combatir la pesca INDNR y proteger los recursos marinos.
Adelantó que la primera aparición de estos colosos en el puerto de Bayóvar (Piura) y la pronta llegada de otras tres naves a este mismo puerto, ha encendido las alarmas entre los principales actores del sector pesquero.
Según la programación de arribos y zarpes de la Autoridad Portuaria de Bayóvar obtenido a través de la plataforma de REDENAVES, se espera que en las próximas horas arriben al puerto otras tres naves de China. Se trataría del Pu Yuan 777, Huan Yi 788 y Jin Hai 829.
“Es lamentable ver cómo luego del reciente anuncio del ministro de la Producción sobre el fortalecimiento de los controles satelitales para las embarcaciones extranjeras, se ha intensificado el arribo de estas naves que han aprovechado la interpretación laxa de la anterior gestión del PRODUCE para ingresar sin un adecuado control a los puertos peruanos”, expresó Miranda.
Afirmó que, además, es lamentable como se vienen incumpliendo los compromisos que Perú ha suscrito en foros internacionales.
“Estos han sido la base para que en años anteriores nuestro país fuera considerado un ejemplo en la región en la lucha contra la pesca ilegal. Le pedimos al actual ministro, Sergio Gonzales, que tome acciones con la celeridad que amerita”, solicitó.
Por su parte, Henry Juárez, presidente de la Asociación de Pescadores Artesanales dedicados a la extracción de pota, perico y otros Parachique – La Bocana (APADEXPO) y actual secretario de la Sociedad Nacional de Pesca Artesanal (SONAPESCAL).
Cabe precisar que Gonzales, quien encabeza la cartera del Ministerio de la Producción, recientemente asistió a la 36ª sesión del Comité de Pesca (COFI), un evento organizado por la FAO.
En esta reunión, la comunidad internacional exigió mejoras en la gestión del calamar gigante y una mayor transparencia de la flota china de aguas distantes.
Cabe precisar que el ministro Sergio Gonzales anunció hace menos de un mes la publicación de un decreto supremo para garantizar la exigibilidad del uso del seguimiento satelital peruano a toda embarcación calamarera extranjera que intentara usar facilidades portuarias de Perú.
Sin embargo, mientras la normativa anunciada duerme el sueño de los justos, ya vienen entrando a Perú más de 80 barcos chinos con toda clase de cuestionamientos.
Por ejemplo, de las naves identificadas, el Hai Feng I presenta altos indicios de pesca ilegal. Según Starboard Marine Intelligence, en los últimos 60 días, el Hai Feng I habría apagado su sistema anticolisiones AIS durante casi 10 días.
Además, durante su ingreso al Perú, esta nave habría apagado el AIS en más de dos ocasiones, acumulando más de 24 horas sin enviar señal dentro del territorio nacional.
Cabe precisar que esta nave ingresó antes que JiaDe18; no obstante, por razones desconocidas, ha estado viajando a una velocidad más lenta que su compañera y ha programado su arribo a Bayóvar 12 horas después.
Por otro lado, es importante mencionar que el día 12 de julio arribó a Chimbote el barco chino Pu Yuan 818, un barco que en los últimos 6 meses ha apagado sus equipos anticolisiones AIS durante casi 10 días.
Además, hay indicios de que también habría apagado el AIS por 2 días entre el 11 y el 13 de junio, muy cerca de las 200 millas y frente a Chimbote.
Finalmente, es crucial señalar que el apagado del sistema anticolisiones AIS no solo es un indicador de posibles actividades ilegales, sino que también pone en riesgo la seguridad de toda la tripulación.
Al dejar de emitir señal, el barco desaparece del sistema de rastreo, aumentando el riesgo de colisiones con otras naves. Este peligro no es teórico; ha habido casos documentados de colisiones entre barcos debido al apagado del AIS por una de las embarcaciones.
Esta práctica irresponsable no solo desafía la legalidad, sino que también compromete la integridad y seguridad en el mar, subrayando la necesidad de una vigilancia más estricta y sanciones severas para quienes infringen estas normas.