Queridos hermanos lectores, bien sabemos que nosotros los humanos, hemos sido creados, por un Dios Jehová, con un hermoso planeta tierra, con todas las necesidades que gozamos de generacion en generacion, y que nuestra vida tiene mucho valor ante los ojos de nuestro Dios, y de su hijo Jesús. El primero consejo de nuestro PADRE Jehová, “Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazon; y de toda tu alma y con todas tus fuerzas”. El consejo que nos dio Jesús con su primer mandamiento es de: “Amarás a tu prójimo como a ti mismo”. Nuestro Padre Jehová de sus 10 Mandamientos, el sexto dice: “No matarás”, el octavo Mandamiento dice: “No hurtarás-robarás”. Son mandamientos que están en nuestra mente y en nuestro corazón que cumpliéndolos nuestras vidas estarán en la gracia de nuestro Dios y su Hijo Jesús. La vida humana es única, ningún otro ser vivo tiene la creatividad, las habilidades sociales y los sentimientos que tenemos los seres humanos. Nosotros sabemos disfrutar de los sabores, los olores, los sonidos, los colores y los paisajes. Además hacemos planes para el futuro y le buscamos sentido a la vida. Nuestra vida es un regalo de un creador que nos quiere. A lo largo de nuestras vidas vamos aprendiendo habilidades y obteniendo experiencias en los diferentes cargos que hemos tenido en los diferentes empleos y roles de vida. HOY NUESTRO PERÚ; Estamos viviendo de que la justicia y la verdad son dos palabras hoy deshonrradas. Entonces nos preguntamos, que nos falta para un cambio, eso está en uno mismo de reflexionar, para plantear y ver que hacemos juntos por nuestro país. El pueblo está cansado, ya no lo cree a los políticos, porque su arte está en la mentira y la hipocresía; los malos gobiernos son una de las principales causas de todos los males de nuestra sociedad. Bien sabemos que, en nuestra vida, es un constante cruce de caminos. Es un discurrir continuo de decisiones que merecen para bien o para mal todos esos futuros que pudieron ser y no fueron, porque deseamos lo que nos conviene, haciendo diferencia radicalmente de los demás seres humanos. Bien sabemos que el presidente y sus congresistas cambian las leyes de la constitución a su manera. Quien cambia y elabora una nueva Carta Magna es la propia clase política de acuerdo con el pueblo; una constituyente sin consulta es fraude, es por ello que estamos como estamos. Delitos: en nuestro Perú, estamos llegando al extremo de que parece que no es posible tener un equipo para la investigación del delito, o los cambios del Código proceso Penal. Durante la vigencia del Código de procedimientos Penales de 1940, la Policía se encargaba de realizar el denominado, “atestado Policial”, donde además de realizar los actos de investigación, concluía calificando el delito y el grado de responsabilidad del investigado. Las experiencias de los equipos de investigación en el mundo existen, por lo que resulta extraño que en nuestro país no se hagan los esfuerzos para superar los problemas y más bien continuemos con una pugna que termina debilitando el sistema Penal. Apliquemos la pena de muerte. Mirando el infierno en que vivimos. La criminalística, ha demostrado que carecen de sentimiento de arrepentimiento. Conviene recordar que la pena de muerte ya está contemplada en la constitución de 1993, y está vigente para el caso del delito de traición a la patria; está previsto en el artículo 140 de nuestra carta magna. Como buen Peruano, digamos que no solo pienso, sino que también lo sufro, os digo ¡Sufre Peruano Sufre y el mal está en los Políticos! Como buen Cristiano Yo César, salgo por las calles de Chimbote con mi pancarta que dice: “Dios es Amor”, “Ama a tu Prójimo”, “No lo robes”, “No lo mates”; Esperando que la gente cuando lo lea tome conciencia. Nuestro Dios condena a los criminales: La Biblia lo dice, anticipándonos en el Antiguo Testamento, con Moisés: Levítico cap. 24: 17,20,21. Para terminar queridos hermanos leer la Biblia, y amarnos los unos a los otros, para estar en la gracia de Nuestro Dios. Estemos preparados Cristo ya viene. Pues bien queridos hermanos que la Bendición de Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo que esté con todos vosotros. Amén.