Preocupante
“Realmente es preocupante lo referente a estos hospitales, del que se ha inaugurado y de los que se van a inaugurar en este 2025, porque pueden llegar a convertirse en elefantes blancos, porque un hospital para que funcione, necesita tener personal médico en cuatro especialidades básicas: medicina, cirugía, pediatría y ginecología y para eso deben tener médicos especialistas”, palaras textuales del médico oftalmólogo del Hospital Regional Leandro Pérez Álvarez, consultado por nuestro Diario a raíz del informe publicado ayer sobre la inversión hospitalaria en nuestra región.
Pérez Álvarez es puntual porque se refiere a la contratación de los médicos para cada uno de esos hospitales y nos hace una referencia clara y directa de lo que puede significar el funcionamiento de cada uno de esos hospitales después de sus inauguraciones.
Puso como ejemplo a los hospitales de Casma y Huarmey. Si hay un cirujano y hay un ginecólogo, necesita por lo menos anestesiólogos que puedan cubrir esas áreas y el problema aquí es un médico, un especialista, si tiene la decisión de ir a trabajar a Casma o a Huarmey, porque no sabe que la única actividad que va a hacer en ese hospital, porque son poblaciones pequeñas y particularmente no van a poder solventarse.
¿Que se tiene que hacer? Y la respuesta de Leandro Pérez fue directa, “lo que hizo Acuña con el hospital de Otuzco, es decir, han obtenido un presupuesto especial para contratación de personal, no por terceros, porque nadie irá a trabajar por terceros, se le tiene que dar estabilidad a todo el personal y tiene que pasar a un CAS indeterminado”, afirmó.
Explicó que un CAS indeterminado es un nombramiento, porque esa es la única figura para que un médico tome la decisión de irse, de saber que lo nombrarán, va a tener derecho a vacaciones y pago por año de servicio. Es lo que podemos definir de un CAS indeterminado.
Lo que se tiene que hacer es trabajar en base a ese esquema, en lograr que se les pueda dar perspectiva a esos médicos para que puedan ir a esos lugares, o en todo caso, en hospitales que trabajen sus 150 horas y lo hacen en quince días, y luego irse a otro lugar, quizás podría ser así. Lo que quiero decir es que deben darse mecanismos para que el médico especialista pueda ir a esos lugares.
Luego, el médico Leandro Pérez es mucho más claro y directo: “De otra manera, ese hospital se va a convertir en una posta más, donde van a estar médicos generales y donde no se va a poder usar la infraestructura que se ha creado, por eso, se tiene que analizar bien cómo se va a definir la contratación del personal médico, cual es la modalidad que se le daría a ese personal para que pueda ser accesible y puedan ir a laborar. ¿Hoy día que busca un médico? Su estabilidad laboral. Si le das estabilidad laboral y tenga sus 150 horas, y luego irse a otro lugar a buscarse la vida, creo que sería una de los mejores manera de poder hacer accesible una oportunidad de trabajar en esos hospitales. Es decir, entender que primero debemos darle estabilidad y no solamente hablamos de médicos, estamos hablando de enfermeras, porque hay quienes tienen especialidad, ellas no solamente son enfermeras generales, hay enfermeras que hacen especialidad en sala quirúrgica, enfermeras que hacen UCI y todo lo demás.
Nuestro Diario le preguntó por el presupuesto que ha destinado el MINSA para el hospital de Yungay, que es de 14 millones y es para todo el 2025 y repitió lo mismo, es decir, que primero hay que darle estabilidad a cada uno de los especialistas y, además, ese presupuesto destinado no creo que alcance para el año, por eso digo, que esos hospitales pueden convertirse en elefantes blancos, apuntó finalmente el Dr. Leandro Pérez Álvarez.
Nuestro diario publicó ayer que de nueve hospitales en ejecución ya se inauguró uno (Yungay) con un costo actualizado de 351’920,619 soles y además hay otros ocho que se entregarían en este 2025. Estos son de Caraz con un monto actualizado de 404’671,295 soles; Recuay 376’547,601 soles; Pomabamba 599’896,764 soles; Casma 372’578,502 soles; Huarmey 220’069,454 soles; El Progreso, Chimbote 105’665,778 soles; Huari 194’331,698 soles y San Jacinto, Nepeña, 53’868,706 soles. esa inversión llega a la fabulosa cifra de dos mil seiscientos setentinueve millones 550 mil 411 soles.