¿Nadie controla esta entidad?
Nuevas irregularidades en la Beneficencia Pública de Chimbote puso al descubierto un trabajador de dicha institución quien se siente decepcionado de la gestión del presidente del directorio, Italo Alegre.
Con documentos en mano explicó que en la entidad hay privilegios para algunos servidores como ocurre con el caso de Francisco Cribillero Gálvez que trabaja en la oficina Serfis ubicada en el jirón Manuel Ruiz.
Paúl Orbegoso Mejía indicó que Cribillero Gálvez llega tarde a trabajar o hasta no llega a trabajar y pese a ello no le descuentan de su sueldo como señala la normativa, dijo.
“Llega tarde muy por encima de la tolerancia y hay dias que no llega a trabajar y de eso hay un informe que lo tiene la gerencia, pero no lo sancionan y le pagan como si hubiera trabajado ¿Por qué?” dijo esperando la respuesta de la gerente de la institución benéfica.
Añadió que siendo la Beneficencia Pública una institución de servicio social le resulta cuestionable que el Presidente del directorio y la gerente no adapten los correctivos necesarios.
Su cuestionamiento lo dirige también a Pedro Quiñones su jefe inmediato en el Serfis que le ha permitido seguir faltando a la institución.