Por ausencia injustificada de los abogados de los procesados Zoila Milla Rodríguez y Ángel Paredes Quipuscoa; la mañana de ayer no se pudo instalar el juicio oral por “lavado de activos” que involucra al actual rector de la Universidad San Pedro, Gilmer Díaz Tello y otros exdirectivos de dicha casa de estudios, además de sus familiares, para quienes la Fiscalía ha solicitado se les imponga 11 años y 6 meses de prisión efectiva.
Ante ello, los magistrados José Luis Cáceres Haro, Lizz Muñoz Beteta y Edith Arroyo Amoroto, quienes integran el Juzgado Penal Colegiado Supraprovincial que emitirá sentencia este proceso penal, decidieron reprogramar el inicio del juicio oral para el lunes 2 de abril, disponiendo que en caso no se justifique la ausencia de los letrados o no sean cambiados por los imputados, se les asignará defensores públicos para llevar a cabo de todas maneras las diligencias.
En la audiencia de ayer, los magistrados también advirtieron la ausencia del procesado José María Huamán Ruiz (prófugo de la justicia por tener una condena de 3 años de cárcel), por lo que dispusieron que sea declarado reo contumaz. Los jueces, advirtieron que no permitirán más dilaciones en este juicio oral y ordenaron que se notifique a la defensa pública para que disponga de abogados que asuman la asesoría legal de quienes no tengan defensa técnica en la próxima audiencia.
En este juicio oral son procesados el rector de la U. San Pedro, Gilmer Díaz Tello, su esposa Asunción Carbajal, el prófugo ex rector José María Huamán Ruiz, sus familiares Verónica Fernández Pinedo, Sara Mujica Mostacero, Zoila Milla Rodríguez, Esmeralda Rodríguez Rodríguez, los ex directivos de dicha casa de estudios, Manuela Portales Pairazamán y su esposo Ángel Paredes Quipuscoa.
Para todos ellos, el Ministerio Público ha solicitado una pena de 11 años y 6 meses de prisión efectiva. En el caso de Huamán Ruiz y sus familiares, se les acusa de haber lavado dinero provenientes de los fondos ilegales obtenidos por asesorías fantasmas de abogados en favor de la Universidad San Pedro y sobre lo cual existe una sentencia condenatoria firme y consentida.
En el caso de Gilmer Díaz Tello y su esposa Asunción Carbajal Valverde así como los esposos Manuela Portales Pairazamán y Ángel Paredes Quipuscoa, la investigación fiscal determinó un desbalance patrimonial con bienes, transferencias de dinero y muebles, que no han podido justificar.