Terminaron en la cárcel. Los tres sujetos detenidos por participar en el espectacular asalto a una furgoneta cargada con productos de la empresa Ripley fueron enviados a prisión de manera preventiva por un espacio de siete meses.
Tras una maratónica audiencia, donde se evaluaron los graves y fundados elementos de convicción, el juez Víctor Alcocer Acosta, a cargo de Juzgado de Investigación Preparatoria del Módulo Básico de Justicia de Huarmey declaró fundado el pedido formulado por el representante del Ministerio Publico por el delito de robo agravado.
Juan Carlos Leocadio Altamirano (37), Jesús Martín Campos Aparicio (42) y Alex Vargas Castro (44) reconocieron su participación en los hechos y aunque trataron de indicar que estaban arrepentidos y que iban a colaborar con la justicia, dicha coartada no les sirvió para ser internados ayer mismo, en el Penal de Cambio Puente.
Según consta en la investigación fiscal, el pasado 27 de marzo al promediar las 03:05 de la tarde en circunstancias que el vehículo tipo furgón de propiedad de la Empresa Estación Danisa circulaba por la carretera Panamericana Norte con dirección a Lima transportando mercadería de la empresa Ripley, a la altura de la provincia de Huarmey fue interceptado por un vehículo plateado el cual les cerró el paso a fin que se detengan.
Tras ser interceptados bruscamente, los tres sujetos descendieron del automóvil y le apuntaron con un arma de fuego al conductor y su copiloto. Otros cómplices aparecieron en la escena a bordo de otro vehículo color rojo, quienes a empujones cubrieron el rostro de las víctimas, llevándolos hacia un descampado y haciéndolos correr, para luego huir por la Panamericana Norte.
Los agraviados fueron divisados minutos después por un transportista quien los acercó hacia el Peaje Fortaleza, donde comunicaron del hecho al personal de Carreteras. Luego de montar un operativo, los sujetos fueron avistados a 30 kilómetros del lugar, con dirección a la provincia de Casma, siendo capturados en medio de una tenaz persecución.
Estos elementos narrados por el representante de la Fiscalía fueron determinantes para que el juez Víctor Alcocer Acosta ordenara su internamiento preventivo en un penal, mientras concluyen las investigaciones y se consigue dar con el paraderos con los cómplices que lograron fugar.