La población escolar del colegio César Vallejo de Casma quedó pasmada ayer con el caso de una estudiante de 15 años de edad que repentinamente sufrió un ataque de convulsiones sin explicación alguna que algunos consideraron que se trata de un caso de posesión maligna.
Este hecho ocurrió en momentos que la escolar de iniciales RGC se disponía a ingresar a los ambientes del taller de Arte. En cuestión de segundos y a vista de todos sus compañeros perdió el conocimiento, se desvaneció y empezó a convulsionar retorciéndose en el piso.
Inmediatamente fue auxiliada por sus docentes, quienes de inmediato la trasladaron hasta el hospital San Ignacio donde minutos después llegó la madre de la menor, y en medio del llanto buscaba una explicación frente a los hechos.
Según el progenitor, fue en el sector de “La Carbonera” que una mujer le había invitado un mango a su menor hija. Según explicó, el padre de familia, fue con esta mujer con quien días antes había sostenido una fuerte discusión.
Los padres de la menor pertenecen a una congregación evangélica, y atribuyeron el inusual hecho al juego de la ouija, por lo que recibieron el apoyo de un pastor. Este oró por la escolar quien por su parte no dejaba de retorcerse en la camilla por lo que tuvo que ser sujetada por varias personas.
Horas después la menor logró recuperar su estado conciente y está recuperándose, no obstante, los progenitores aseguraron que adoptarán medidas al respecto.