Fábrica fue mal rematada:
Trabajadores de TUCCHISA con carteles de muestra de apoyo hacia conviviente.
Un grupo de trabajadores que laboraron por mucho tiempo en la empresa conservera Tucchisa, y que injustamente quedaron desempleados luego que este inmueble, fuera vendido irregularmente a un precio irrisorio, exigen que se anule al acto jurídico de venta y recuperar su lugar de trabajo que les pertenece.
Entre gritos y reclamos, los trabajadores, algunos de avanzada edad, dijeron que la venta, se habría hecho a José Reyes conocido como Chalaco, y sienten que de esta manera, les han robado la fábrica que les pertenecía, están cansados de tanto engaño y exigen una solución.
Por su parte el abogado de estos trabajadores Ángel Quezada Tomás, señaló haber planteado la demanda contra este acto jurídico (de venta) porque la fábrica se vendió por un monto irrisorio que no se ajusta a su precio real, dejando de lado, el peritaje de los dos ingenieros civiles, que valorizaron este inmueble en dos a tres millones de soles aproximadamente.
“La Junta que lo vendió, no tenia atribuciones legales, pero aún así, lo hizo por 30 mil soles, monto irrisorio, por eso presentamos la demanda para que se anule ese acto jurídico, incluso hay una medida cautelar, pero como en primera instancia la demanda salió infundada, la otra parte se ha aprovechado y han pedido el levantamiento del embargo, pero ya la Sala a cargo del Dr. Walter Ramos, tiene conocimiento de ello”, señaló el abogado Quezada Tomás.
Confían ahora en un fallo justo, donde impere la ley se aplique la justicia porque los trabajadores, necesitan su inmueble a ellos, los han perjudicado y los han dejado fuera.
Lamentaron que en primera instancia, el Juez no haya tomado en cuenta, la prueba fundamental que es la pericia de los ingenieros, por lo tanto, no se dio el debido proceso.
“Por eso se apeló el fallo en primera instancia, porque el Juez cometió un error, confiamos ahora en el Juez superior y se emita nueva sentencia, declarando fundada la demanda, estamos a la espera y ojalá no demore mucho, todo depende de la carga procesal, todas estas personas quieren justicia”, agregó el abogado.
Son cerca de 40 socios los que vienen luchando, uno de ellos es Carlos Díaz y otros más en las mismas condiciones y exigen justicia, un fallo justo de acuerdo a ley.