Es velado en Parroquia “Sagrado Corazón”:
Padre Bertino Otárola Figueroa ya descansa en paz.
A la edad de 88 años falleció la madrugada de ayer el Padre Bertino Otárola Figueroa, sacerdote de características peculiares, muy directas, francas y vehementes en el llamado a la práctica de la vida conforme al evangelio de Jesús.
El deceso de este también campechano y querido religioso se produjo a las cero horas con 45 minutos de la madrugada causando honda consternación en la comunidad en general de esta parte del país.
Sus restos se encuentran velando en la parroquia Sagrado Corazón de Jesús, ubicado en la avenida Pacífico, frente al colegio República Argentina, en el distrito de Nuevo Chimbote hasta donde llegaron muchas personas.
El Padre Bertino, como muchos solían llamarlo afectuosamente, era el más veterano sacerdote de la Diócesis de Chimbote y en agradecimiento a su valioso aporte al crecimiento espiritual en la ciudad fue condecorado con la Medalla de la Ciudad que otorga la Municipalidad Provincial del Santa el año 2015.
En las redes sociales muchos lamentaron su penoso deceso. También lo recuerdan con frases cálidas tanto de amistades como familiares.
“Quienes lo conocimos sabemos que fue una persona alegre y poseía una gran calidad humana. Mi querido tío Bertino Otárola Figueroa el recuerdo que nos ha dejado definitivamente será imborrable. Rogamos al Señor que lo tenga en su Santa gloria y que quienes nos hemos quedado aquí, podamos aprender a convivir con su ausencia. Te amo y te agradezco por todos los momentos lindos que me hiciste vivir. Siempre vivirás en mi corazón…” escribió muy apenada su sobrina Leonor Otárola.
Su sobrina María Luisa Otárola también lo evoca y lo considera como un segundo padre. Además compartió algunas fotografías del Padre Bertino, una de las cuales resulta inédita para la opinión pública y es en la que se ve acompañado de un perro al que le se le ve con una mirada de reflexión a las palabras que le diría en ese momento un joven Bertino Otárola.
El Padre Bertino Otárola también se dedicó a la docencia y fue profesor en el colegio nacional San Pedro y en el Inmaculada donde dejó sabias enseñanzas a alumnos y a sus colegas docentes que igualmente lamentan su fallecimiento.