Ahora al costado de un Grifo:
· Transportista lamenta que autoridades se hagan de la vista gorda.
· Estuvo varios días en el lugar y no vio un solo inspector ni Policía de Tránsito.
Paradero informal de autos que cubren servicio a Trujillo.
Los transportistas informales que trasladan a los pasajeros a la ciudad de Trujillo sin ningún tipo de seguridad, ahora han tomado como zona de embarque el grifo que se ubica al frente del Terminal Terrestre el Chimbador.
Esta denuncia, la hizo el trasportista Carlos Paredes Ascate, quien hace algún tiempo, denunció esta ilegal forma de trabajar, cuestionando la labor de la Policía de tránsito e inspectores de la Municipalidad Provincial del Santa, y ahora nuevamente hace la denuncia por un nuevo lugar de embarque informal.
“Hace unas semanas atrás, hubo un accidente justamente de uno de esos autos que llevan a Trujillo en condiciones de inseguridad y murió una persona, entonces de qué estamos hablando, hasta dónde vamos a esperar para que las autoridades tomen cartas en el asunto”, señaló Paredes Ascate, quien dijo llevar muchos años como transportista y sabe como se maneja esta situación y lamenta que las autoridades se presten para eso.
Lamentablemente, dijo todos ven este embarque informal por distintos puntos del terminal terrestre, el Megaplaza, y ahora el grifo, menos la Policía de tránsito ni los inspectores, ellos son los únicos que no se dan cuenta lo que ocurre o no se quieren dar cuenta.
“Esto sigue porque las autoridades lo permiten, no es posible que no hayan agentes del orden en estos lugares estratégicos, he estado por estos sitios durante toda una semana y no me crucé con ningún inspector y si hay policías, es uno que otro y por momentos”, agregó, dejando entrever que habrían otros intereses por los cuales los ilegales transportistas estarían protegidos y permitidos de hacer este tipo de trabajo informal.
Finalmente, dijo cando no hay control, hacen lo que quieren y eso es lo que está pasando en esta zona desde hace mucho tiempo y lamentablemente los entes que deberían actuar, no lo hacen de verdad, sólo tratan de justificar su trabajo con pequeñas intervenciones que no son satisfactorias porque no hay resultados.