ASPECTO
A muchos ha sorprendido, y hasta conmovido, el aspecto físico que presenta el ex presidente regional César Álvarez Aguilar ahora que se encuentra recluido en el penal de Cochamarca, en las alturas de la Región Pasco. Con la barba crecida, con prendas gruesas y chullo dejaría la impresión que se encuentra en malas condiciones, sin embargo, es la protección que tiene en la medida que está purgando carcelería en un establecimiento penitenciario que se ubica en una zona fría y de un clima bastante gélido. Eso no debería sorprender a nadie, es algo natural para la población penal que allí existe, lo que si sorprendió al juez Joseph Arequipeño Ríos, que está a cargo del proceso penal conocido como “Caso SISA” y en el que reaparecido anteayer Álvarez Aguilar, es la actitud de la abogada de la ex autoridad regional, Jessica Arteaga, quien apareció junto a su patrocinado, también bien forrada, en el Penal de Pasco. La letrada se dio tiempo para viajar a este lugar y pretender participar de la diligencia en ese escenario cuando su lugar estaba en la Sala de Audiencias del módulo judicial de Chimbote. Al parecer a la joven letrada se le olvidó que el juicio se ventila en un juzgado de nuestra ciudad y, por tanto, ella debería estar en la mesa que corresponde a los abogados, incluso, el Juez pudo tomar esta maniobra como una inasistencia de la abogada porque ella conoce el procedimiento. Por lo demás, la mala comunicación con el penal de Cochamarca es algo previsible, ha ocurrido en otras ocasiones en juicios en los que los acusados se encuentran en penales alejados, lo que se hizo más complicado con la abogada de Álvarez fuera de su escaño. Bueno el juez ha apercibido a la letrada que adopte un comportamiento procesal como le corresponde o de lo contrario se verá precisado a subrogarla y reemplazar por un defensor público. Fuera avisada…….
PAPELON
No tienen convocatoria y cuando convocan a un paro provincial generalmente terminan realizando una reducida movilización y pese a no tener representación legitima buscan que imponer una agenda al alcalde provincial. Nos referimos al dirigente del Frente de Defensa Fernando Andrade Moreno, quien ha emplazado al alcalde provincial a que los reciba en una audiencia en la que pretender plantearle la solución a la grave problemática que atraviesa la ciudad. Sin embargo, cuando se le preguntó los temas que quieren plantear al alcalde, el ya trajinado dirigente comenzó a demostrar que esta desenfocado y algo desubicado, pues los problemas municipales que esgrimió ya son materia de tratamiento por parte del Municipio, como el de la basura, inclusive, incluyó entre estos algunos asuntos que son de materia gubernamental. Por ejemplo, señaló a la recesión y la paralización del aparato productivo, tema que no es asunto del alcalde y hasta de los servicios de agua y energía eléctrica (¿?). Lo más grave que dijo es que el alcalde debería cambiar de estrategia y encabezar la lucha contra la anemia y la desnutrición infantil. Tal parece que del combativo dirigente de antaño ya no queda nada, pues Fernando Andrade desconoce los temas tan elementales como la lucha contra la anemia ya que debería saber que esta es una estrategia del Gobierno central, existe como política nacional un programa denominado Meta 4 qué ya está en marcha y que tras una primera etapa emprendida a nivel sectorial ha anunciado una segunda etapa que ya involucra la participación de los municipios. Una previa revisión de la problemática nacional no le caería nada mal, más que nada para que no haga otro papelón.
RELEVO
Justo cuando comentamos en este mismo espacio la grave denuncia de un comerciante de joyas contra un efectivo de la Policía de investigación criminal que le pidió 5 mil soles para capturar a los autores el asalto del cual fue víctima, el alto mando policial emitió un comunicado dando cuenta que se había relevado del cargo al S.O. Romel Hilario López y rechazando toda practica que atente contra la ética y que constituya una grave infracción a la institución. Lo que sorprende es que se afirme que el mes de Abril se detuvo a dos presuntos autores del asalto, sin embargo, hasta la fecha que el agraviado denuncio este hecho ni siquiera tenía conocimiento de estas detenciones. He allí un caso de falta de comunicación que termina afectando a la propia institución tutelar.