Desde hace ya algunos años los medios de comunicación han informado de una serie de hechos que han acontecido en torno las instituciones educativas y de alumnos que han perdido el oriente y han caído en una serie de vicios, como el alcohol y las drogas.
Los desvaríos de la clase escolar de nuestra provincia han trascendido las gravísimas fugas de los vaqueros de hace algunos años, un hecho que ahora ya no llama la atención. sino que han llegado a extremos insospechados, incluso, lindan con la muerte.
Basta echar una mirada a los archivos periodísticos para darnos cuenta de los caminos descarriados que han tomado algunos adolescentes en edad escolar, como el caso registrado en la capital de la república, en donde una adolescente mató a su compañero de clases luego de accionar un arma de fuego que había llevado en su mochila luego de sustraerla del cajón donde la guardaba su progenitor.
Por ello nos apena que en nuestra ciudad se haya registrado un hecho antisocial protagonizado por una escolar del Colegio “República de Yugoslavia” que cursa el cuatro año de secundaria, es decir, que está próxima a concluir la vida escolar y buscar otros horizontes académicos, pero que ha caído en las malas costumbres de sustraer las cosas, pues fue sorprendida cuando le había robado el teléfono celular a su propia maestra.
Esta estudiante fue descubierta por sus propios compañeros de clases, quienes la observaron acudir hasta el portón de ingreso del colegio, para pasar por debajo un objeto a una persona que la esperaba afuera y que resultó siendo su enamorado Cristian Reinaldo Abano Abano (21), de nacionalidad venezolana.
La docente agraviada María Rodríguez Espejo denunció el hecho a la Comisaría de Buenos Aires en el distrito de Nuevo Chimbote y los efectivos policiales llegaron hasta la institución educativa, luego que la menor de 16 años de edad ya había confesado ante la docente y directora ser autora del hurto.
Inclusive, en la nota policial se da cuenta que inicialmente la alumna negó los cargos, pero ante la sindicación de sus propios compañeros, terminó admitiendo que cogió el equipo celular y se lo pasó debajo de la puerta a su enamorado, quien habría inducido a la menor para que cometa el ilícito penal.
¿Que sucederá con la escolar de solo 16 años? Pues será investigada por infracción penal contra el patrimonio (Hurto) por el Fiscal Luis Cruzado García de la Primera Fiscalía Civil y de Familia de Nuevo Chimbote, en tanto que el ciudadano venezolano Cristian Reinaldo Abano Abano fue intervenido y será investigado por el delito de receptación por la Fiscal Silvia Solórzano Villanueva de la Segunda Fiscalía Penal de Nuevo Chimbote.
Esta es la secuela de los equivocados caminos que toman los adolescentes y jóvenes que han escapado al control de sus padres, que proceden de familias disfuncionales, jóvenes que no han recibido el calor de hogar y que no han crecido en medio de los valores que deben predominar en la formación de los hombres de bien.
Por lo menos, la escolar que fue sorprendida en un acto ilícito pero que para su edad se califica como antisocial, tiene la suerte que a diferencia de las medidas que se tomaban en antaño, que ante un caso similar ya estaría expulsada del Plantel, lo que se ha decidido es someterla a un tratamiento psicológico dentro del mismo centro educativo, se buscará recuperar de ella la senda de un camino correcto y estimular su entorno familiar y amical dentro de un ambiente que le permita salir de los caminos equivocados que había tomado.
Y es que no ha hay que ser un erudito para comprender que esta niña ha sido inducida y persuadida para caer en el campo del delito, fue instruida para robar al interior del Plantel y ha sido utilizada por los malos elementos que pululan por las calles.
Justamente, ha sido un ciudadano venezolano el que ha captado a la alumna, un sujeto mucho mayor que ella y que, es de presumirse, no tiene oficio ni beneficio en esta vida, que ha llegado junto al conglomerado de ciudadanos del país llanero que han salido huyendo de su patria en busca de mejor porvenir.
Sin embargo, un enorme grupo de estos extranjeros no se ha dedicado a trabajar y esforzarse por salir adelante ante la adversidad que los llevó a salir de su patria, por el contrario, se han dedicado a delinquir, a vivir a costa del esfuerzo de otros, como en este caso que ha utilizado a una adolescente en edad escolar para que consiga los objetos robados que le dejen dinero.
Infortunadamente, la revolución tecnológica ha permitido que los menores y adolescentes tenga acceso a nuevos canales de comunicación que en el ciberespacio está colmado de sujetos que solo buscan que aprovecharse de la candorosidad de las niñas, no solo para aprovecharse de ellas y pretender ultrajarlas, sino para utilizarlas, para aprovechar que viven el sueño de la pubertad y las encandilan solo para que las internen a un submundo en el que solo se vive de la delincuencia.
Hay un sabio dicho que dice que “no hay mal que por bien no venga”, en tal sentido, el hecho que la escolar de 16 años haya sido sorprendida en flagrante delito la semana pasada en su propio centro educativo, haya servido para rescatarla de las garras de la corrupción a la cual, indefectiblemente, la habría llevado el sujeto que la sedujo y la convirtió en su enamorada solo para delinquir.
Es un hecho que los adolescentes que se encuentran en esa transición de la niñez a la pubertad, suelen ser rebeldes y equivocan los caminos del bien, son fácilmente manipulados y terminan siendo utilizados como ha ocurrido en este caso, de allí que el rol de las autoridades es promover los ciclos de orientación y educación.
Hay que arrancarle a la mala vida a estos muchachos que no saben aún discernir de lo que es bueno o malo en la vida, que aún viven una efervescencia que no les permite marcar distancias de aquellos sujetos que solo las captan para aprovecharse de ellas. Estamos frente a una absoluta desorientación de nuestros adolescentes en edad escolar, las autoridades educativas deben emprender talleres y charlas de información, más aun ahora que se han establecido en nuestra ciudad inmigrantes entre los que se han infiltrado gente muy negativa. Esperemos que se haga algo al respecto.