Asaltaron a joven estudiante
Pedro Miguel Ferrer López y Juriko Shirley Paredes Ramírez en audiencia judicial, antes de terminar a prisión.
Luego de asaltar con un cuchillo a una trabajadora de un casino de Chimbote, una pareja de facinerosos que a bordo de una mototaxi venían sembrando el terror y miedo en el P.J “Esperanza Baja”; fueron finalmente enviados al Penal de Cambio Puente con 9 meses de prisión preventiva, mientras los investigan por robo agravado.
Pedro Miguel Ferrer López (32) y Juriko Shirley Paredes Ramírez (31) fueron reconocidos plenamente por la agraviada K.R.S.CH (22), además del esposo de ésta y un vigilante de la zona, quienes acudieron en su auxilio y los encontraron escondidos entre unos arbustos.
El representante del Ministerio Público fundamentó su pedido de prisión sobre la base de la ferocidad con la que actuaron (le pusieron el cuchillo a la agraviada en el abdomen) y luego su cinismo para confundir a las autoridades y negar haber participado en el ilícito, todo lo cual fue desbaratado en las primeras diligencias realizadas.
Durante la intervención policial de intervención, un gran número de vecinos de la zona, denunciaron que todos los días se venían produciendo robos de dos personas que iban a bordo de una mototaxi de placa de rodaje MPY- 8839, la misma que quedó incautada.
Pedro Miguel Ferrer López y Juriko Shirley Paredes Ramírez asaltaron la madrugada del martes a K.R.S.CH (22) quien había salido de su centro de trabajo en el Casino Las Vegas de Chimbote. Eran las 3.20 de la madrugada cuando descendió de un colectivo en la calle Atahualpa, cuando fue interceptada por una mototaxi con placa de rodaje MPY- 8839.
De dicha unidad, descendió Pedro Miguel Ferrerl López portando un cuchillo que se lo colocó a la altura del abdomen de la agraviada, exigiéndole que entregue su cartera donde llevaba 540 soles, un equipo celular y sus tacones que utiliza en su trabajo.
Tras apoderarse de la cartera, Pedro Ferrel se dirigió a la moto y entregó la cartera a Juriko Paredes Ramírez, quien estaba sentada como copiloto en la moto. Cuando pretendía huir, la agraviada gritó y pidió auxilio, siendo apoyada por su esposo y el vigilante de la cuadra que dos cuadras más adelante, hallaron a Pedro Ferrer López y Juriko Paredes Ramírez escondidos en unos arbustos.