En momentos en que el contagio del COVID 19 está llegando a límites insospechados., cuando las cifras en el país de infectados y muertos crecen en dimensiones desproporcionadas todos los días, la mayoría de peruanos busca la manera de alejarse de toda posibilidad de adquirir la enfermedad.
De allí que le aterra la idea que junto o cerca de su domicilio se encuentre alguien que se ha contagiado y cree que esa sola presencia podría perjudicarlo, rechaza su presencia y hasta genera un cuadro de pánico que no tiene razón de ser.
Esto es lo que viene ocurriendo con cientos de personas que en las últimas semanas han repudiado la posibilidad que en su barrio o zona de residencia se lleven a personas contagiadas con la finalidad de someterlas a un periodo de cuarentena en el que pueden superar este mal sin que existe la contingencia de pasar el virus a otros.
Es el caso de los pacientes asintomáticos., como se les conoce a las personas que se han contagiado con el virus pero no lo manifiestan con procesos gripales, cefaleas, fiebre y todas aquellas sintomatologías que se conocen de este mal.
Entonces para esta gente, esta alternativa ÂÂÂ es la más peligrosas en este momento en la medida que puede llevar el virus a su entorno familiar y lo puede regar a cuanto lugar se dirija, de allí que las autoridades del sector salud han decidido mantener en cuarentena a estas personas por espacio de 10 días y le han buscado lugares adecuados para ello.
Primero calcularon la posibilidad que este refugio de asintomáticos se pueda ubicar en el centro recreacional del Colegio Médico de Chimbote, gremio que lo puso a disposición por tratarse de un terreno bastante amplio en el cual se pueden acondicionar camas y todo lo necesario para atenderlo mi8entras su organismo elimina al COVID 19.
Frente al rechazo de los moradores del PPAO, en la zona que colinda con el centro recreacional, los vecinos rechazaron esta alternativa alegando que los expone a un mal que hasta el momento viene cobrando miles de víctimas en el mundo.
Por ello es que las autoridades decidieron alquilar Hoteles y Hostales, en donde existen habitaciones que cuentan con televisor, con comida y allí podrían pasar los días los pacientes asintomáticos.
Esta alternativa nace del mecanismo que puso en marcha el Gobierno al establecer el asilamiento social obligatorio, a mediados de marzo, y se vio en la necesidad de repatriar a miles de peruanos que se quedaron varados en otros países, especialmente en los Estados Unidos, y clamaban por regresar.
Fue entonces que se dispuso que estos jovwnes que estaban en condiciones de ser trasladados a nuestro país, primero deberían ser no solo sometidos a una exhaustiva evaluación, sino que deberían ser sometidos a una cuarentena obligatoria y lo hicieron contratando a Hoteles que ven reactivar su actividad que estaba paralizada.
Sin embargo, los vecinos de estos Hoteles han expresado su rechazo y repudio a esta alternativa de solución, y han renegado del hecho que puedan llevar a inmuebles ubicados cerca de sus domicilios a pacientes positivos pues consideran que está latente la posibilidad de contagio.
Esto no es cierto, la única posibilidad de contagio es el contacto con una persona infectada o por no lavarse permanentemente las manos y mantener el distanciamiento social, no existe otra forma de contagio, por el hecho que una persona infectada duerma en un inmueble vecino ello no quiere decir que se podrían contagiar.
De allí que se tornan absurdas las protestas de vecinos de El Trapecio, del balneario Tortugas y otros frente al estadio que han rechazado la posibilidad que los hoteles vecinos alberguen a estas personas.
Esto complica los objetivos de las autoridades, mas aun cuando los propios pacientes asintomáticos no quieren acudir a estos hoteles porque prefieren hacer cuarentena en su domicilio, sin percatarse del grave peligro que ello representa.
Hay un marcado prejuicio respecto a los hoteles o la decisión de convertirlos en inmuebles para la cuarentena, sin embargo, a la luz de todo lo que sabemos del mal, estos temores son infundados. Los albergues serán los inmuebles más aseados debido a la permanente desinfección a la que serán sometidos y el desplazamiento de personal que ha sido preparado para esta emergencia. Hay que ser un poco tolerantes y no discriminar a la gente.