Política

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DESCABEZADO

Aunque suene a un chiste de mal gusto, nuestra región se mantiene desde el pasado fin de semana sin gobernador regional, sin que nadie se haga responsable por lo que ocurra en Ancash, pues Waldo Ríos no solicitó licencia, no se ausentó con permiso del consejo regional y menos aun dejó a algún funcionario encargado de su despacho. Sin embargo, el gobernador estuvo ausente desde el pasado viernes cuando una Sala penal de Huaraz lo declaró reo contumaz y ordenó su captura para que fuera trasladado a ese despacho y responda por los cargos que se encuentran pendientes en su contra. Desde ese momento, al promediar el mediodía del viernes, Ríos Salcedo, por consejo de sus asesores y abogados, se ocultó de la justicia, se puso a buen recaudo y se guareció en algún lugar de la región pues se encontraba en Pomabamba y se supone que debería retornar a Huaraz, por ello la Policía lo esperó en los controles de la carretera Chacas San Luis pero el gobernador no pasó por allí. Es evidente que se quiso impedir que Waldo Ríos fuera capturado y llevado a la carceleta del palacio judicial de Huaraz en donde debería permanecer hasta el día de ayer lunes, por ello era evidente que los abogados le pidieron que se ponga a buen recaudo hasta el lunes en que lo presentarían ante las autoridades. Sin embargo, todos sus cálculos se fueron al tacho cuando la misma Sala Penal, tras evaluar los acontecimientos que son de dominio público, al advertir que Waldo Ríos se ha venido burlando constantemente de la justicia ha decidido variar el mandato de comparecencia que tenía en este proceso por uno de detención, es decir, con orden de internamiento en el Penal de Huaraz.  Esto es sumamente delicado por las connotaciones que tendrá para la gobernabilidad de la región, asumimos que sus abogados impugnarán esta decisión, empero, hasta que se resuelva el gobierno regional queda descabezado. Seguramente que el consejo regional tendrá que reunirse de emergencia porque la orden de detención involucra que el titular de Áncash no se presentará porque permanecerá en la clandestinidad o si se pone a derecho irá al Penal. Pensar que ayer mismo salió una segunda orden de contumacia y mandato de captura y en un tercer proceso lo emplazan para que se presente el 31 bajo apercibimiento de declararlo contumaz. La cosa se pone fea para Waldo Ríos.

EXTRAÑO

Lo curioso de todo esto es que Waldo Ríos Salcedo no es cualquier hijo de vecino, menos aún un desconocido que deambula por las calles y tenga que sortear a la justicia. Se trata de la máxima autoridad en la región, es un dignatario en la región y como tal cuenta con seguridad y protección policial permanente, con mayor razón cuando realiza viajes y desplazamientos. Si esto es así y el viernes pasado el gobernador había viajado a Pomabamba, se supone que en ese momento contaba con seguridad, por ello no se entendía como es que la Policía Judicial que recibió la orden de captura de la Sala Penal no se puso en contacto de inmediato con los custodios del gobernador regional para solicitarles informen el lugar donde se encontraba y para que dispongan su aprehensión en atención a la orden que les había llegado. Ayer mismo se informó que Waldo Ríos los adelantó, estando en Pomabamba recibe la noticia de su captura y decide retornar a Huaraz, empero, a mitad de camino se baja del vehículo y le dice a los dos custodios que lo esperen porque iría a coordinar con sus funcionarios que estaban en otra camioneta. Sin embargo, en realidad Waldo se fugó, los dejó esperando hasta que al cabo de algunos minutos se dieron cuenta de la maniobra cuando el mismo General los llamó para pedirles que detengan al Gobernador Regional pero ellos “ya estaban solos, tristes y abandonados” en medio de la carretera. Faltaba más.

INTOLERANCIA

Llama la atención que grupos políticos que se llenan la boca hablando de democracia y respeto a los derechos ciudadanos, resulten los primeros que promuevan las movilizaciones antifunjimoristas que tienen por objeto perturbar el desarrollo de los mítines de la candidata de Fuerza Popular Keiko Fujimori. Cierto es que todos tenemos derecho a expresarnos libremente, empero, lo que no podemos hacer es fomentar la violencia, estas agrupaciones y hasta colectivos civiles son conscientes que estas manifestaciones lo que hacen es derivar en enfrentamientos y actos violentos, por ello hizo bien la Policía Nacional anteayer domingo en Nuevo Chimbote, cuando formó un cordón policial e impidió el paso de los contramanifestantes porque era evidente que se generan revueltas que al final de cuentas dejan saldo de heridos y contusos. Mucho cuidado que con esta clase de actitudes que los muestran como grupos totalitarios, verticales e intransigentes que piensan que solo lo que ellos piensan es la verdad absoluta y eso es exactamente la antípoda de la democracia que dicen pregonar. Mucho cuidado con eso, a nadie lo pueden obligar por la fuerza a dejar de simpatizar por tal o cual candidatura, si hay quienes creen en la propuesta de Keiko Fujimori se le respeta o se le contradice con argumentos, no se le grita o insulta.