Por. Juan Teruel F.
Los candidatos a la Presidencia de la Republica del Peru, son tantos que todos buscan su conveniencia política, como si el país fuera un botín. Es conveniente que el Jurado Nacional de Elecciones, tenga en cuenta que para las Elecciones Generales del 2021, el texto y la trama de la vida de cada candidato este bien escaneados en el Registro Electoral – si tienen sentencias condenatorias con calidad de cosa juzgada por delito doloso vigente, ordenes de captura nacional o internacionales, deudas coactivas en la Sunat y deudas Municipales, como tributos, arbitrios, impuesto predial – ello para evitar que estos poderes del Estado se vuelvan a llenar de personajes de esta calaña, es que la opinión pública y la voluntad popular han logrado las promulgaciones de normativas que bloqueen las postulaciones de quienes presentan antecedentes que los descalifican.
Sin embargo, conspicuos candidatos como Martin Vizcarra, Kieko Fujimori, Nidia Vilchez, Ollanta Humala, han eludido cuidadosamente, toda menciona a sus cuitas actuales con la justicia y ciertamente, no deben ser los únicos. De hecho, otros más deben estar en la lista de omisiones peligrosas. Ya sabemos lo que nos espera si llegan a ser gobernantes o congresistas.
Para ser Presidente de una nación se requiere ser un estadista, versado en negocios de Estado en materia de política. Declara inteligencia, con una visión que va mas alla, como un líder ejecutivo moderno. Debe tener conocimientos económicos geográficos y de leyes. Sus vinculaciones estatales deben estar relacionadas, con el exterior a fin de tener prestigio y crédito extranjero.
Salud, educación y trabajo, deben ser las metas del desarrollo del país. Un hombre con esas conclusiones y cualidades de lastre – aunque pocos pero los hay – como Miguel Hilario, el primer nativo que a logrado doctorarse en Oxford y tiene la nitidez mental de un verdadero estadista. El un personaje que ha generado en la amazonia peruana su candidatura. Un hombre de talento extraordinario que ninguno de los candidatos presidenciales los tiene.
Lamentablemente ya se cerraron las inscripciones. Sin embargo, vemos a Kieko Fujimori, está en carrera electoral. Una mujer que es investigada por lavado de activos por el caso de Obredecht. Igualmente el partido Aprista con su candidata Nidia Vilchez y Ollanta Humala, quienes nada tienen ante el juego electoral, pero si mucho que responder ante el poder judicial por el dinero recibido para sus campañas electorales, subvencionadas por la empresa brasileña Obredecht.
En estas elecciones del Bicentenario que deben de ser limpias en homenaje a los 200 años de nuestra independencia como se merece nuestro país, los electores – que ya no creen en ningún político – en este nuevo sufragio, el buen elector comprende que la política es como la musuca, tiene sus bemoles y sostenidos.
Es decir, la danza de la política cuyo ritmo armonioso es los compas – para el “pase” de millones de soles – mientras la alteración en las notas altas y bajas sel sonido natural, siguen su curso hasta la doble rotación, marque un doble bemol o doble sostenido que es cuando la música expresa su mayor sonido y el político, hace su requiebro con la costilla mientras chocolateante con ella un romántico bolero.
Y con la alegría de la música se lleva al molibdeno, poniéndose la mascarilla del covid-19, para evitar contagios. Después con esa forma que le caracteriza, regresa para que lo vacunen en estas elecciones donde hay tanto desinformado como analfa, que el mismo político se ofrece a vacunarlo por su partido antes que lo lleven a la U.C.I. para votar por la inmortalidad.
Pero Dios castiga a todos que vamos a hacer con el virus de la pandemia que re extiende y profundiza entre la ciudadanía con cifras de contagiados o fallecidos y con la aparición de una nueva sepa del patógeno.
La segunda ola de contagiados es más evidente que no sabemos a ciencia cierta cuando comenzara la vacunación en nuestro país. Lo positivo que podemos esperar de esta pesadilla es la vacuna contra el COVID19.
El presidente de la Republica Francisco Sagasti, ha anunciado la compra de la vacuna China. Según la publicación en los diarios es inobjetable la noticia. Solo que habrá que esperar la llegada de las vacunas para confírmalas.
Pero yo me pregunto de que nos servirá tener las vacuna si, primero el gobierno no tiene la logística afinada para inyectarla a lo largo del país en el menor tiempo posible.
Mi impresión es que la vacuna llegara recién en varios meses, salvo el millón de dosis para los peruanos que serán vacunados con el lote ofrecido por Sagasti para el fin de verano, los otros 20 millones probablemente lleguemos a fin de año sin vacuna. Ver para creer de ser verdad la vacuna China de Sinopharm esa que han comprado Francisco Sagasti y Pilar Mazzatti deberían ser ellos los primeros en inocularse ese producto tan confiable, pero televisada y con notario al costado, para que asi los peruanos se animen cuanto antes con pócima China.
Tras las investigaciones de la pandemia del coronavirus – que ataña al mundo entero – encontraran la vacuna contra el covid-19 que n os preservara de este mal, es algo maravilloso. Nuestras vidas cambiaran dramáticamente, porque como sucede en nuestro país – hemos visto animar un carnaval estilo Brasil, cuando todos acaban por bailar en la fiesta. Debido a ese organismo procariota, será unicelular tiene varias especies que atacan por todos lados y con alcances multifamiliares.
Además no les quita sobrevivientes.
!Dios nos libre! De esa maldición infernal.