Por: Miguel Rodríguez Liñán (*)
¡Colombia! ¡Columbia! ¡Columpio! ¡Colombia colombina palomina, tu nombre viene de Cristophorus Colombus, también conocido como Cristóbal Colón! ¡Colombia tierra querida, siempre! ¿Y Perú campeón? ¿Virú? ¿Birú? ¿Pirú? ¿Perú? Cuando los españoles llegaron al Reino, le preguntaron a unos autóctonos cómo se llamaba ese maravilloso lugar pródigo en oro, los patas respondieron en su lengua, dijeron Virú… Virú es el nombre de una cultura precolombina, es decir antes de Colón, al norte, llegando al actual Trujillo, se come bien rico y se toma chicha riquísima… Por la putamadre, ¿hace cuánto tiempo que no le ganábamos a Colombia de Columbus? ¿Diez? ¿Veinte años?… Ayer por la tardecita, en Barranquilla la bella, tierra de Joe Arroyo, peruchos vencieron a colochos gracias a la ley fatal… La única ley, por lo demás, que nada tiene que ver con la justicia ni con el mérito supuesto del equipo que no metió goles, y esa ley es, precisamente, el que no los mete, los ve hacer (dixit Flaco Ernesto).
Cuando vivía en París con aguacero a principios de siglo, en una de esas fiestas que en la Tour de Montparnasse organizaba el perucho Alejandro, también conocido como el Tombo, casado con una colocha de Cali, un pata caliche cachaco (de Bogotá) me instruyó. « Soy admirador del fútbol peruano » dice « tengo cincuenta años y recuerdo muy bien, el gancho Cueto y Guillermo La Rosa, qué bello apellido, jugaron en el Atlético Nacional, después La Rosa jugó en el América de Cali » sigue diciendo « y Sotil jugó en el Independiente de Medellín » Ah oui ? « Sólo un año, la temporada del 79-80 » dice y yo recuerdo la memorable debacle del Alianza Lima por entonces, la terrible Copa Libertadores, Cueto y La Rosa habían partido al Nacional, Sotil al Independiente, ¿y Cubillas? ¿Y Jorge Olaechea? ¡El equipucho de la U nos ganó seis a tres en el partido inagural!… El fiestón sigue en la Tour de Montparnasse, suena fuerte la salsa con mi canción preferida que es y no hago más ná, más ná… « ¿El Cholo Sotil en país colocho? ¡Esa no la sabía! ¡Y si la sabía se me olvidó!
Sigue la fiesta de hace veinte años, me sigo acordando… « Y en el pasado Félix Castillo, que jugó en el América de Cali » « ¿Félix Castillo? Voy a buscar en internet » « Ismael Soria en el Millonarios, Alejandro Gonzáles en el Independiente de Medellín, Constantino Perales en el mismo equipo, y tantos otros, como el mago Loayza en el Deportivo Cali… » Este pata colocho, un erudito del fútbol continental del lado de allá, me recuerda el curriculim vitae de Miguel Loayza, Barcelona, River Plate, Boca Juniors, en el Huracán, ¿qué pasó con el mago Loayza en Perú campeón? ¡Sólo fue seleccionado una vez, en 1959! ¡Y después nunca más! ¿Qué pasó? Mi tocayo Miguel Angel Loayza Ríos, ídolo en Cali, era un charapa de cepa, nació en Iquitos en 1940, y murió en Buenos Aires el año del 2017 del siglo… ¡También jugó en Rosario Central! me informa Wikipedia… Y en las temporadas del 69 al 71, en pleno auge de Perú campeón, en el Deportivo Cali, no entiendo qué pasó… lo más probable es que el mago haya sido una especie de Juan Charrasqueado, indisciplinado, rebelde, borracho, parrandero y jugador… ¡Un salucito por el mago Loayza, amigos!
Esto escribo, amigos, porque hoy, después del triunfo perucho, pensé en mis patas colochos habitantes de las Galias, el Flacus, la Boa Rengifo también conocido como Cristo, Octavio de París, Andrés el Viejo tal que anda buscando grutas habitables en la Sierra Nevada de Granada, Papá Torres made in Chiquinquirá, el único poeta veterainario colocho de la historia universal, bueno, al menos que conozco en carne y hueso, estamos en otro pleistoceno, muchachos, veinte años no es nada y febril la mirada, pienso también en mi primo Julián Rodríguez, en Jorge Aníbal y en otros tantos, aparte de mis patas poetas peruchos constato de que el noventa y cinco por ciento de mis patas son originarios de Colombia Columbia Columbita caramba carambita carambilu carambilu lá… ¡Tres hurras por Colombia y por Virú! ¡Estoy seguro de que clasificaremos! ¡Salú por eso! ¿Y Jorge Olaechea? ¿En el Independiente de Medellín? ¿Durante la bella época de don Pablo? ¿Después en el Deportivo Cali? ¿Y la famosa goleada del Deportivo Cali contra el Alianza Lima en Matute aquella tarde amarga de no sé qué día en la Copa Libertadores 1978 de la que todavía me acuerdo? ¡Estaban todos! ¡Velásquez! ¡Cubillas! ¡Cueto! ¡Sotil! ¡Guillermo La Rosa! ¡Y los colochos nos golearon en Matute! ¡Diego Edison Umaña! ¡La Mosca Caicedo! ¡El arquero Zape! ¡Pedro Zape! ¿Estaba la Mosca Caicedo? ¿Y Otero?
La víspera de aquel viernes 31 de enero del siglo en curso, hablé con el Flaco Ernesto de Cali y de Marsella, él dijo que gane el mejor, y yo por joder dije, digo, que gane el que mete el gol o los goles, no hay otra ley, Flacus… Ja ja ja se ríe y sigo oyéndolo… ¿Y las estadísticas? Eso no vale, digo, todo es puro pasado, todo ya pasó, los equipos eran distintos, los entrenadores distintos, todo era diferente de verdad, eso de la estadísticas son cojudeces, sólo valen los equipos de hoy, bueno, de los tiempos actuales. Apenas al colgar el fono mágico voy a consultar en la biblioteca del milenio, que dice… « Por la clasificación al Mundial, ambas selecciones se han medido en veintiún ocasiones, de las cuales doce fueron victorias para Columbia, seis a favor de Virú, y tres terminaron en empate » ¡Ah! ¡Carajo! ¡O sea que según las estadísticas somos los chanchos de Colombia!… ¿Y cuándo fue la última vez que los peruchos les ganaron a los colochos allá en Colombia la bella? ¡En agosto del 2001! ¿Está segura, Madame Wikipedia? ¿O estás jodiendo? ¡Por la putamadre! ¡Hace veinte años! Ah oui ?… Después del histórico e inverosímil partido hablé con el Flaco, después con Cristo ahora llamado Charly Ren, después con Andrés, para animarlos… Colombia es una potencia del fútbol actual, ganarle es una empresa gigantesca.
Ahora, hablando de esto, me acuerdo del Mundial en Brasil, cuando el arbitraje favorable les robó el partido a Colombia frente a los locales… ¡Bien caro pagaron la facturita del destino los brasileiros! ¡Bien hecho carajo! ¡Eso les pasa a todos los que se las dan de bacanes! ¡Y que hacen trafa!… También me acuerdo de un partido amistoso relativamente reciente, colochos 3, franchutes 2, en París, contra los futuros campeones del mundo, de modo que, hoy más que nunca, todo es posible, todo puede pasar, así es el fútbol.
¡Qué día tan bello! ¡Qué bello amanecer! ¡Yo me levanto por la mañana tomo mi café, como mi cruasán y no hago más náa! ¡Lo siento, patas colochos! ¡Ya me imagino lo que sintieron! ¡Le ganamos a Colombia en Colombia! ¡Golazo del divino Oreja Flores incrustado en un pequeño espacio imposible! ¡Viva el gran Gareca! ¡Tres hurras por los muchachos! ¡Tal es la magia del fútbol! ¡Y Ospina! ¡Ese arquerasazo! ¡Lo único que hizo en todo el partido fue ir buscar la pelota en las redes! ¡O de pronto ni iquiera la buscó! ¡Peruchos y colochos, qué historia! Hay partidos así, tan sórdidos, tan sórdidos como dice el poeta, cuando la pelota no entra en el arco adverso… El fútbol es exactamente como la vida misma, es decir, el que no mete goles, los ve hacerlos… ¡Perú campeón! ¡Salú por eso!
(*) Escritor y Poeta radicado en Francia