Para variar, venezolano:
Un sujeto de nacionalidad venezolana de 23 años, que le arrebató el celular a una menor de edad permanecerá cumpliendo su sentencia de 12 años de cárcel, que le impusieron en primera instancia, al probarse su responsabilidad en el delito de robo agravado.
Su recurso de apelación fue declarada infundada por los integrantes de la Segunda Sala Penal de Apelaciones de la Corte Superior de Justicia del Santa.
El Ministerio Público acusó a Cristhian Reinaldo Abano Abano por robo agravado luego que el 7 de noviembre de 2019, alrededor de las 9:30 de la noche, por inmediaciones de la urbanización Cáreces Aramayo, se abalanzó sobre su víctima, la lanzó al suelo y tras amenazarla con un filudo cuchillo de cocina, le quitó su teléfono.
Tras cumplir su cometido, el sujeto abordó una mototaxi con dirección al óvalo de Bruce. Con apoyo de efectivos de serenazgo de Nuevo Chimbote, la menor ubicó a su agresor dentro del vehículo usado en el robo, que estaba estacionado en un paradero.
Al verse acorralado, Abano Abano corrió hasta el mercado Buenos Aires, donde fue reducido y capturado. En su poder se encontró el celular robado.
En primera instancia, Cristhian Abano recibió una sentencia condenatoria de 12 años de prisión, así como el pago de 800 soles de reparación civil.
Su abogado defensor apeló el fallo y pidió la absolución, argumentando que no existió evidencia probatoria que vinculara al sentenciado con el robo, pues el celular robado no estaba en posesión de su defendido, sino que estaba dentro de la mototaxi. Sostuvo que la menor agraviada lo sindicó porque durante el asalto escuchó el acento venezolano del delincuente.
Para los integrantes de la Segunda Sala Penal de Apelaciones, los argumentos de la defensa no fueron suficientes para desvirtuar la culpabilidad de Cristhian Reinaldo Abano Abano, por lo que decidieron confirmar el fallo inicial, así como el monto de la reparación civil. El sentenciado será puesto en libertad el 6 de noviembre de 2031.