Cientos de agricultores de los valles de Santa y Chimbote salieron a las calles la semana pasada para retomar las banderas de reivindicación del proyecto especial Chinecas y la reforma de su diseño que ha sido contemplado en el Perfil Sisa, el cual resulta perjudicial para los intereses de los hombres de campo de nuestra jurisdicción.
En esta oportunidad acompañados por la dirigencia en pleno y los gremios afines del Frente de Defensa de la Provincia del Santa, los hombres de campo reclamaron al Gobierno regional que ahora encabeza Enrique Vargas Barrenechea, que deshabilite el proyecto especial Chinecas aprobado en el Ministerio de Economía y Finanzas sobre la base del perfil Sisa, debiendo modificarse el diseño para que se contemple la Bocatoma Única y el reservorio en el sector de la Huaca.
Los manifestantes pusieron especial énfasis en este tema de la bocatoma Única porque representa una aspiración no solo de quienes cultivan la tierra sino de los pobladores de la provincia del Santa y de la Región Ancash que reclaman la prioridad en el uso de los recursos hídricos del río Santa.
Y es que en las condiciones en la que está diseñado el proyecto, con una bocatoma para Chinecas en el sector de Tablones, dejaría al proyecto Chavimochic en ventaja porque su bocatoma se ubica aguas arroba, es decir, que controlará el uso de las aguas del río Santa y dejará los saldos para el riego de las áreas de cultivo de Chinecas.
Esto lo consideran un abuso y un despropósito en la medida que el afluente se encuentra en nuestra jurisdicción, por lo tanto, son las tierras de cultivo de nuestra provincia y de los sectores aledaños los que requieren prioridad en el uso del recurso hídrico.
Por ello es que desde hace muchos años ya han planteado la necesidad de incorporar la Bocatoma Única dentro del perfil que se ordenó y se adjudicó a la empresa SISA, sin embargo, el ex presidente regional no los escuchó y tampoco lo han hecho quienes lo han sucedido en el cargo en razón que se sometieron al trabajo realizado por la cuestionada empresa a la que se le pagó una millonada por un trabajo deficiente que, al final de cuentas, debió ser modificado en el Ministerio de Economía y Finanzas.
Lo que plantean los agricultores es que ambos proyectos, tanto Chavomochic como Chinecas cuenten con una bocatoma en un mismo punto, de tal suerte que de esta manera se distribuirá el recurso hídrico de manera equitativa, posición que resulta siendo solidaria con quienes ya utilizan desde hace años nuestro afluente y por el cual no han pagado absolutamente nada a los organismos de nuestra región.
Al margen de ello, lo que se quiere es que se termine con el monopolio en el uso de los recursos hídricos por parte de los funcionarios del proyecto liberteño, por ello no están dispuestos a dar un solo paso atrás en este planteamiento de la bocatoma única, aun cuando ello represente unos años más de demora o una ampliación presupuestal.
De la misma manera, los agricultores variaron su posición del diseño original de Chinecas que planteaba la construcción de un reservorio e n la zona de Cascajal y han planteado que este centro de almacenamiento se ejecute en la Huaca, en el mismo sector en donde se encuentra una de las bocatomas que distribuye a la fecha las aguas hacia los valle de cultivo de Chimbote y Santa.
Esta última ponencia tiene que ver con la ubicación estratégica y con las medidas de seguridad, pues Cascajal ha crecido y es un centro poblado en el que no se debería exponer a sus habitantes con una estructura hidráulica que debería ubicarse en zonas un tanto más alejadas y la mejor ubicación sería en La Huaca.
Lamentablemente, en los últimos años los agricultores no han sido escuchados, el encarcelado ex presidente regional César Álvarez se mantuvo en sus trece y emprendió un diseño ajeno a los planteamientos de los hombre de campo, inclusive, a pesar que apenas empezó su gobierno los convocó a tallares en donde se expusieron los alcances del diseño que debería tener el proyecto irrigador, evento en el cual se le insistió en la necesidad de incluir la bocatoma única y el reservorio en La Huaca, empero, no los escuchó.
Han transcurrido ya 32 años desde que se creó el proyecto especial Chinecas para la construcción de un ambicioso sistema de riego para el aprovechamiento de las aguas del Rio Santa, para la puesta en marcha de un sistema agroindustrial que se constituya en la alternativa económica de la pesca, empero, hasta la fecha el proyecto irrigador sigue siendo un sueño desesperado de los agricultores.
Aun cuando dicen que las comparaciones son odiosas, no se puede dejar de mencionar que mientras Chinecas se encuentra ahora en fase de estudios y expediente técnico, con un perfil que no convence a nadie y que es objeto de cuestionamiento por los agricultores, en La Libertad el proyecto Chavimochic, que se nutre de nuestras aguas del río Santa, ya se encuentra en una tercera etapa, es una envidiable realidad que genera ingentes recursos a la economía de los trujillanos.
Desgraciadamente, la entrega del proyecto Chinecas al gobierno regional selló su suerte, en manos de gente que solo tuvo ojos para el aprovechamiento de los recursos públicos, Chinecas pasó a ser otra de las entidades regionales invadidas por el clientelaje, sus técnicos fueron virtualmente echados y se llevó a funcionarios cuyo único mérito era el haber apoyado en campaña al presidente regional o batir fuertemente las palmas.
Así las cosas las marchas y movilizaciones de los agricultores se convierten en un grito ignorado, en una voz que retumba una y otra vez pero que no debe fatigarse ni apagarse, solo en base a la movilización de masas y, esencialmente, a la unidad de todos los Chimbotanos se conseguirá que se tome en cuenta la opinión de uno de los principales segmentos de la actividad agrícola como son los hombres de campo. Aun estamos a tiempo, lo que importa es que no se siga postergando a Chinecas como ocurre hasta la fecha.