Coincidiendo con el inicio de las vacaciones escolares, las calles en el distrito de nuevo Chimbote se han visto invadidas por niños y adolescentes que buscan la mejor manera de divertirse y aprovechar este lapso de paralización de las actividades educativas al culminar un año lectivo.
En la urbanización Buenos Aires, capital del distrito de Nuevo Chimbote, han aparecido los grupitos de jóvenes que han encontrado en las Cuatrimotos el elemento especial de diversión, son máquinas con poderosos motores que les permiten imprimir excesivas velocidades.
Nada tendría de extraño todo esto sino es por la enorme irresponsabilidad de los jovencitos propietarios de estas máquinas o de quienes se ponen al volante, pues no solo viaja el chofer y un acompañante, sino que a estas máquinas suelen subir cinco, seis y hasta ocho menores que se cogen como pueden de los estribos de la máquina.
En estas condiciones suelen correr por las calles sin que cuenten con un solo sistema de seguridad, ninguno lleva casco y menos aún cuentan con alguna licencia o autorización que determine su pericia para ponerse al volante de estos vehículos menores.
Quienes han visto a estos menores se sorprenden porque suelen hacer competencias entre ellos y corren a excesiva velocidad, hacen maniobras temerarias, inclinan las máquinas y pone en serio riesgo a quienes los acompañan.
Pese a que todo esto es público y notorio ni la Policía o el serenazgo interviene a estos muchachos permitiendo que su inmadurez ponga en peligro no solo su vida y su integridad física, sino la de quienes los acompañan en estas máquinas.
En peor condición se encuentran los padres de estos jóvenes que a sabiendas del peligro que representan no solo para sus vástagos sino para sus acompañantes y para cualquier transeúnte que se cruce con ellos, los dejan que hagan estas maniobras temerarias.
PIROTECNICOS
Pero eso no es todo. En estos días navideños, los locos del volante en las cuatrimotos han estrenado una nueva “travesura” a su manera irresponsable de desempeñarse en las calles, como es el uso de los pirotécnicos.
Como su tema es llamar la atención de los demás, descubriendo su complejo de inferioridad, se han premunido de pirotécnicos de alto poder explosivo, los denominados “mamarratas” que suelen detonar con gran estruendo y expone al peligro a cualquiera.
Se trata de los mismos pirotécnicos que las autoridades han prohibido de manera terminante una y otra vez en estos días, inclusive, la Policía ha dramatizado en la Plaza Mayor sobre las funestas consecuencias que pueden sufrir aquellos que manipulan esta clase de explosivos y han advertido que su uso es ilegal.
Sin embargo, estos adolescentes que se movilizan en cuatrimotos hacen lo que quieren en las calles, alteran la tranquilidad del vecindario, destruyen los bienes públicos al detonarlos sobre los mismos y exponen alegremente su integridad al encender estos pirotécnicos que pueden estallar en sus propias manos.
Estos “angelitos” se pasean por las calles de Nuevo Chimbote, exponen su vida y la de los demás, infringen toda clase de normas pero ni la Policía ni el serenazgo los intervienen y llaman a sus padres para que los controlen como corresponde. Apostamos que solo lo harán cuando ocurra una desgracia y ya sea demasiado tarde.