“Parecía que era terremoto”, “pensé que de esta no pasábamos”, “nos tomó desprevenidos” fueron algunas de las expresiones que los chimbotanos exclamaron tras el fuertísimo temblor sentido a la 1:42 minutos de la madrugada de ayer cuando la gran mayoría dormía.
“Pensaba que iba a pasar, pero se hizo más intenso y por varios segundos muy diferente a otros que han ocurrido”, “felizmente Dios no ha querido que ocurra una tragedia” dijeron otros comentando aun nerviosos por lo sucedido.
El sismo fue de una magnitud de 5.6 con epicentro en el mar. Exactamente a 52 kilómetros al sur oeste de Chimbote y a una profundidad de 49 kilómetros, según reportó el Instituto Geofísico del Perú.
Quienes salieron a la calle, como comúnmente suele suceder, lo hicieron en prendas menores con las que estaban durmiendo. Y el llanto de los más pequeños no se hizo esperar. Ellos temieron por la caída de las casas y para reponer el sueño interrumpido tuvieron que ser calmados por sus padres.
Pasado el temblor todos volvieron a sus casas aunque algunos se quedaron en la calle a la espera que se pueda producir otro movimiento sísmico y no los vuelva a sorprender durmiendo. Efectivamente minutos después llegó una leve réplica que de todos modos asustó a todos.
Pasado el susto las personas mayores de 60 años que experimentaron el terremoto del año 1970 rememoraron esa tragedia en tanto que otros recordaron preparar la mochila de emergencia tal como difundió Defensa Civil.
Respecto de este temblor, la alcaldesa de Chimbote, Victoria Espinoza García indicó que efectuó un recorrido por la ciudad acompañado del Secretario Técnico de Defensa Civil, Guillermo Abril, llegando a constatar que no se registraron daños materiales ni personales.
Indicó que recogió información que al momento del movimiento telúrico el mar se retiró varios metros para luego volver a su estado normal y para nada se registró alerta de tsunami. En este sentido cuestionó y rechazó a la información que apareció en las redes sociales sobre un anuncio de tsunami.
El de ayer por la madrugada fue el de mayor intensidad que se registró en los últimos tiempos en Chimbote (con alcance hasta Trujillo) y ha hecho a todos tomar en serio tener implementado la mochila de emergencia.