Diez años después del crimen en agravio de Enrique Salazar Guzmán, ex vocal de la Corte Superior de Justicia del Santa, otro de los presuntos participantes del asesinato ocurrido en diciembre del año 2006 fue capturado por la policía Nacional en la ciudad de Lima.
Se trata de Oscar Oliva Camacho, alias “Oscarito”, quien fue intervenido en Lima el pasado 4 de mayo atendiendo la requisitoria por el crimen del ex magistrado y de acuerdo a la acusación fiscal, sería el que condujo la motocicleta que transportaba al sicario que disparó a la cabeza de la víctima perpetrado el 7 de diciembre del 2006 en la segunda cuadra del jirón Carlos de Los Heros.
Tras su detención en Lima fue traído a Chimbote donde permaneció en la carceleta judicial hasta que a las 9 de la mañana fue entregado a la Sala Penal Liquidadora Permanente donde está el expediente del caso.
Debido a que no rindió su instructiva a nivel de juicio en primera instancia (con el código anterior) uno de los vocales hizo de juez instructor y le tomó sus generales de ley para posteriormente postergar la audiencia de inicio de juicio el próximo jueves 19 Â de mayo en el penal de Cambio Puente donde fue internado.
Ante los miembros de la Sala Penal, el detenido dijo desconocer que era procesado por el crimen y que en aquella fecha estuvo internado en un centro de rehabilitación para drogadictos de la ciudad de Lima. Para sustentar su dicho presentó un documento con el que quiso acreditar su internamiento, sin embargo, los magistrados tienen duda de ello por lo que oficiarán a la institución de rehabilitación de drogadictos que le envíen la certificación oficial.
Oliva Camacho también dijo que nunca estuvo en Chimbote y negó conocer a los otros imputados en el asesinato. Hasta hace un año estuvo cumpliendo una condena de seis años de prisión en un penal de Lima y que al salir se dedicaba al comercio. Su historial señala que también estuvo recluido en el penal de Lurigancho, Carquín, de Huacho; y de Cachiche por los delitos de robo y tráfico ilícito de drogas.
Durante la audiencia alias “Oscarito” mostró las cicatrices en diversas partes del cuerpo asi como tatuajes en uno de los brazos y en la espalda. El detenido fue recluido en el penal de Cambio Puente donde Joan Montoro Gómez está purgando condena de ocho años que se le dictó en enero del 2011.