BOCHORNOSO
Los periodistas que estaban cubriendo información en la ceremonia de agradecimiento que prepararon los dirigentes del barrio El Progreso a una alta funcionaria del Ministerio de Salud que llegó para anunciar la puesta en marcha de la acariciada obra del Hospital I en ese sector, no pudieron sino sentir vergüenza ajena al ver al gobernador regional Waldo Ríos Salcedo romper todos los moldes del protocolo habitual y comenzar a entonar el himno de su agrupación política. Pese a que la mayoría de asistentes, excepción hecha de su portátil, ni siquiera sabe que existe un himno de su agrupación política, Waldo Ríos pretendía que todos los acompañaran en este cometido que se mostraba como algo descabellado en una ceremonia especial y netamente institucional. Desde su discurso mismo insulso y aburrido, no se entiende cómo es que este personaje es el principal timonel de la región Ancash. Después de hablar una serie de inconsistencias, Waldo Ríos hizo un alto y dijo a las autoridades que iba a hacer algo que le nace del corazón y cuando todos esperaban que anuncie una gran obra en esta parte de la costa de la región, lo que hizo fue entonar el himno de “Puro Ancash” (¿?). En realidad todos se quedaron en una pieza, el presidente de la Corte del Santa y el alcalde provincial miraban sorprendidos y confundidos a un Gobernador que parece, ciertamente, que le falta un tornillo al comenzar a cantar el himno de su grupo político. El mismo Waldo Ríos fue duramente cuestionado hace unos meses cuando obligó a los docentes contratados a entonar la misma letra cuando ello corresponde a una actividad política interna, es una cuestión netamente partidaria y no tiene por qué incluirse en una ceremonia en la que toman parte las autoridades locales. Ha sido en realidad un acto bochornoso al extremo que había muchos que estaban incómodos y no sabían dónde meter la cabeza de la vergüenza ajena que le generaba un hecho de este tipo.
ALIMENTOS
El ultimo lunes las autoridades del vecino distrito de Nepeña y los directivos del colegio del Anexo San José, afectado por una intoxicación masiva, se reunieron con los representantes de la empresa agroindustrias San Jacinto, sancionando de común acuerdo una serie de acciones que deberá emprender la empresa para salir del grave problema que generó la deficiente fumigación aérea que realizaron en esa zona. Aun cuando la empresa azucarera se ha cuidado de señalar que “ellos no son los responsables del hecho”, decide asumir los costos de esta secuela por voluntad propia, por ello es que correrán con los gastos que irrogue la contratación de una empresa que se encargará de verificar la existencia de restos de elementos químicos en las aulas, de instalar ambientes provisionales para evitar que los alumnos sigan perdiendo clases, también se ha comprometido a cubrir los costos de la intervención de una empresa que tomará muestras de análisis a los escolares afectados con la finalidad de verificar que ya no presenten intoxicación o que hayan quedado daños colaterales como consecuencia de la contaminación de las sustancias químicas. Eso está bien, quienes resultan teniendo una responsabilidad extracontractual deben asumir las consecuencias, empero, no se advierte en estos acuerdos un tema que lo puso en el tapete el Director de la red pacífico Sur, Hugo Meléndez, quien señaló que la empresa agroindustrias San Jacinto debe reponer las toneladas de alimentos de Qali Warma que están almacenadas en el plantel y que ellos las iban a descartar porque consumirlos puede poner en peligro la salud de los escolares. Ese tema no aparece en la lista de acuerdos, así que será bueno que se revise antes que se olviden y perjudique a los alumnos.
RUIDO
El Director de la UGEL Santa tiene dotes de torero pues ha sabido capear con mucha habilidad los rumores que daban cuenta de su destitución y que llegaron a todos los medios de comunicación la semana pasada. El propio Robert Medina Gamboa se encargó de aclarar ante los hombres de prensa que se trataba de una especie falsa, que nadie lo remplazaría y, en efecto ello ocurrió. Inclusive, a despecho que el martes último se apareció, de repente y sin aviso, una comitiva de funcionarios del gobierno regional que encabezaba nada menos que el gobernador Waldo Ríos Salcedo. Cuando los docentes que estaban en la sede educativa ya sacaban sus cuentas sobre la llegada de una resolución, al final se dijo que la autoridad regional solo había llegado para saludar al funcionario. ¿Qué extraño, no?