Los alcaldes de la Región Ancash, reunidos en torno a la Asociación de Municipalidades, decidieron tomar la iniciativa y establecer puentes de dialogo y coordinación con el nuevo gobierno de Pedro Pablo Kuczynski, a efectos de salir de la terrible recesión que viene afectando seriamente la economía regional.
Obviamente el tema que preocupa a los alcaldes, como a todos los ancashinos, es la reactivación de la economía en esta parte del país, por ello es que han decidido plantear al gobierno central la ejecución de obras de impacto cuyo presupuesto supere los dos mil a tres mil millones de nuevos soles, entre ellas el proyecto especial Chinecas, los hospitales Víctor Ramos Guardia de Huaraz y La Caleta de Chimbote.
Asimismo, consideran de suma importancia el asfaltado de la carretera longitudinal del Callejón de Conchucos, la declaratoria en alerta de las lagunas del Callejón de Huaylas y la instalación de una sede descentralizada de la Autoridad del Agua.
Pero uno de los aspectos medulares de esta cita es el relacionado al necesario acercamiento que debe existir con el ejecutivo y por ello es que los burgomaestres ancashinos también solicitarán la realización de sesiones descentralizadas del Consejo de Ministros en la región a fin de formalizar al más alto nivel el compromiso de hacer realidad estos proyectos.
Este en realidad es un tema pendiente con Ancash, lamentablemente el ex presidente Ollanta Humala lo ofreció de manera reiterada durante su mandato y nunca cumplió, por ello es que no se ha podido establecer ese engranaje necesario que se requiere con el ejecutivo con la finalidad que sobre la mesa se plasmen los proyectos que aun están pendientes y la necesaria inyección económica que requiere nuestra región.
Ocurre que siempre se dice que Áncash no necesita de apoyo del ejecutivo en la medida que es una de las regiones privilegiadas con el canon Minero, empero, ello es relativo, esos recursos tienen un destino establecido por la ley, se distribuye entre todos los Municipios y cuando se fracciona ya no resulta la millonaria posibilidad que tiene la región de despegar como todos lo quisiéramos.
Y es que la tajada mayor de este canon la maneja el gobierno regional y las últimas experiencias que ha tenido Áncash con estas autoridades han sido mucho más que lamentables, desde la época de César Álvarez en la que una red de corrupción no solo pulverizó los recursos sino que dejó a la Región estancada y con millonario forado que fue lo que se derrocho y dilapidó.
Su remplazante Waldo Ríos no fue lo que se esperaba, al margen de sus promesas incumplidas, ni siquiera pudo juramentar el cargo por espacio de cinco meses y cuando lo hizo demostró que no tiene la capacidad para manejar los recursos de la región, por el contrario, su gestión navega entre los continuos cambios de funcionarios y el avance es nulo, al extremo que sigue siendo la región con menor niveles de inversión en el país.
Por ello es que los alcaldes han querido tomar la iniciativa, son conscientes que del gobierno regional no se puede esperar nada, más aun cuando después de haber estado relegados y postergados por el anterior gobierno Humalista por las circunstancias que ya todos conocen., el gobernador regional no tuvo el tino de acudir a un conclave nacional que convocó entonces presidente electo Pedro Pablo Kuczynski para conocer la realidad de cada una de las región con cada uno de sus titulares.
Waldo Ríos dejaba la impresión que su región no necesitaba de apoyo gubernamental pues fue una de las dos únicas regiones que no asistieron a este evento y se perdió la gran oportunidad de pactar audiencias y dar a conocer la realidad economía que hace tambalear a nuestra región.
Se contaba en ese momento con un Plan de reactivación que el ex gobernante se negó a recibir y atender, empero, no lo hicieron llegar en su momento al hoy Jefe de Estado y, por lo tanto se tiene que gestionar ante los altos funcionarios del ejecutivo, se tiene que apelar a los congresistas con la finalidad que se escuche a nuestra región.
Por ello es que todos los alcaldes provinciales y distritales de Ancash, han decidido designar a una comisión de 12 alcaldes (6 provinciales y 6 distritales) entre los cuales se encuentra la alcaldesa Provincial, Victoria Espinoza y el alcalde distrital Valentín Fernández, quienes serán los encargados de llevar todos estos pedidos a una reunión que se sostendrá con el Presidente de la República, Pedro Pablo Kuczynski, posiblemente la quincena de este mes de setiembre.
Esperemos que la reacción de los alcaldes tenga éxito, se requiere con urgencia que el ejecutivo ponga los ojos sobre Ancash, hay una serie de obras que se encuentran paralizadas, no se genera trabajo y movimiento económico y miles de familias padecen por ello, el presupuesto de estas obras fue malversado en la gestión anterior y la actual no demuestra capacidad como para superar ese forado y las eche a andar nuevamente.
De la misma manera, en nuestra ciudad vemos a diario como esas obras que se han quedado con altos porcentajes de avance se vienen deteriorando poco a poco, el material que se utilizó sigue perjudicándose y se teme que cuando se retomen los trabajos se tenga que demoler muchas de ellas para comenzarlas de nuevo.
Es evidente que el Ejecutivo tiene que atender los requerimientos de Ancash, y una de las maneras de hacerlo es demandando que se cumpla con la sesión de consejo de ministros descentralizada que tiene pendiente el ejecutivo en nuestra región, allí se pueden plasmar muchos de las urgencias que se tiene en este momento y se pueden adoptar soluciones sobre la marcha, se hacen los estimados de las obras y se decide cuanto es lo que se puede entregar a nuestra región.
Los alcaldes estiman que esta inyección presupuestaria es del orden de los dos mil y tres mil millones de soles, el gobierno regional había considerado cuatro mil millones en la gestión de Enrique Vargas Barrenechea, lo importante es que se adopten acuerdos y con la indiferencia del gobernador regional no se llegará a nada. Vamos a confiar que los alcaldes consigan llevar este urgente planteamiento al ejecutivo, es imperativo que ya se adopten medidas de emergencia para Ancash, la crisis de gobernabilidad lleva muchos años y es necesario salir de ella.