Editorial

JUICIO Y REFLEXIÓN

La navidad es la fiesta más importante en el mundo católico, recuerda el nacimiento del niño Jesús y celebra la llegada al mundo del hijo de Dios, por ello hoy domingo 25 es un día de paz y reflexión, un espacio propicio para cultivar los valores que nos ha dejado el señor y que se expresa en su palabra.

Y es que un día como hoy la estrella de belén se encendió y guió el camino hacia una humilde cueva en donde María había acondicionado un pesebre en el que colocó a su hijo recién nacido, era el hijo de dios.

La unión, la paz y la armonía son la característica de esta fecha, por ello es que todos debemos hacer un esfuerzo para reencontrarnos con nosotros mismos, con nuestras familias con nuestros padres y hermanos, con nuestros vecinos.

Es momento de dejar de lado las adversidades y confundirnos en un abrazo para expresar nuestros sentimientos cultivados en el amor, la amistad, la misericordia, la bondad y el profundo amor al prójimo.

De allí que es momento de trasladar el significado de esta fecha a nuestra realidad y entender que la existencia de conflictos no pueden superar nuestra voluntad para solucionarlos y para promover la conciliación por encima de todas las cosas.

Y es que uno de los conflictos mas preocupantes en este momento lo protagonizan los trabajadores del Poder Judicial, aquellos que forman parte del aparato que administra justicia y que en nuestra ciudad pertenecen a la Corte Superior del Santa, quienes acatan una huelga indefinida decretada a nivel nacional.

Ellos se encuentran paralizados desde hace más de un mes, iniciaron su protesta reclamando una escala remunerativa que responda a sus reales expectativas laborales en la medida que la mayor parte de su sueldo está integrado por bonificaciones y agregados que no forman parte de un básico pensionable que pueda beneficiarlos a futuro.

Junto a esta nueva escala remunerativa aspiraban, obviamente a un incremento en sus remuneraciones, por lo que emprendieron la protesta en el mes de noviembre, entendiendo que en esos días la comisión de presupuesto y luego el pleno del congreso nacional deberán tomar un acuerdo sobre la propuesta del pliego presupuestal del presente año y que fue presentado por el titular del Poder Judicial.

Sin embargo, ni siquiera las presiones de la huelga de los trabajadores influenciaron en los parlamentarios que tanto en la comisión de presupuesto como en el pleno no aceptaron las cifras del pliego del Poder Judicial y las recortaron considerablemente, justamente en el rubro que se había considerado para una nueva escala remunerativa de los trabajadores.

Para compensar este recorte el ministerio de economía y finanzas debería autorizar la entrega de un bono a cancelarse en tres armadas y cuyo monto debería ser establecido por los titulares de los respectivos pliegos, del Poder judicial y el Ministerio Público.

Pese a que ya los huelguistas habían advertido que no volverían a aceptar el pago de un bono o de un aliciente que no tenga efecto pensionable, al final de cuentas admitieron que se cancele el bono pero demandaron que ascienda a 12 mil huevos soles, es decir, cuatro mil soles por cada uno de ellos en las fechas establecidas por el Gobierno, pedido que fue aceptado por el presidente de la corte suprema y lo que daría inicio a un nuevo enfrentamiento que parece condenar a mantener la huelga por algunas semanas más.

Sin embargo, en medio de estas marchas y contramarchas, con la renuencia del gobierno a ceder ante el pedido de los trabajadores se llegó a un punto extremo en el que ya se requiere que los servidores dejen de lado posiciones extremas porque había algunas urgencias que atender, como el pago de los depósitos judiciales de madres alimentistas, de trabajadores o de pensionistas y cuantas personas hacen cobros en la vía judicial.

La inminencia de la navidad hacía necesario que se haga más flexible la posición de los trabajadores judiciales para permitir que mujeres que muchas veces padecen penurias para cobrar exiguas cantidades, se lleven por lo menos algo a su mesa navideña, más aun cuando los propios huelguistas fueron objeto de una compensación que muchos han considerado abusiva o excesiva.

Nos estamos refiriendo al pago que han recibido los trabajadores judiciales en huelga cancelando sus remuneraciones del mes de diciembre y el pago de la gratificación correspondiente a este mismo mes del año, un beneficio que se les ha extendido a pesar que no han trabajado un solo día.

Muchos podrán decir que esto no es problema porque ellos compensarán horas cuando concluya la huelga a efectos de congraciarse con ese pago, empero, esto no es justo y ético, por el contrario ha sido asumido como una componenda que no tiene razón de ser teniendo en cuenta que no ha existido una prestación de servicio.

La negativa de los trabajadores generó una innecesaria escaramuza que llevó a sus dirigentes y agremiados a enfrentarse con el Presidente de la Corte Superior William Vizcarra, quien tiene la obligación de viabilizar la continuación en la prestación del servicio de justicia, por ello dispuso que se abran las puertas y se encontró con varios trabajadores que le impidieron el paso.

Respetos guardan respetos, el presidente de la Corte del Santa es la máxima autoridad del órgano jurisdiccional en Chimbote y los trabajadores son sus subordinados, una huelga no puede dar derecho a nadie a mancillar su investidura y, en ese sentido, los trabajadores estuvieron muy equivocados, como erraron de manera radical al oponerse al pago de los depósitos judiciales de madres que dependen de ese dinero.

Esperemos que la fiesta de la navidad ilumine el camino y el sendero de todos los protagonistas de este incidente que alteró las buenas relaciones de la familia judicial y que en esta fecha especial que celebramos el nacimiento del niño Jesús haya juicio y reflexión en los predios del poder judicial de nuestra ciudad. Que los trabajadores entiendan que sus derechos terminan allí en donde comienzan los derechos de los demás, de tal suerte que si quieren continuar su huelga que lo hagan pero que no se enfrenten ni arremetan contra quienes, con todo derecho, persisten en brindar atención a quienes lo requieran y que estén en condiciones de hacerlo. FELIZ NAVIDAD para todos nuestros lectores.