El sacerdote que ocupaba la capellanía del Hospital Regional “Eleazar Guzmán Barrón”, Luis del Carpio Acosta, denunció que el director del Hospital Regional “Eleazar Guzmán Barrón”, ha decidido retirarlo de su cargo, además de prohibir su ingreso a varias salas del nosocomio sureño.
Muy sorprendido por el hecho, el sacerdote, señaló que Luis Johansson Arias, le otorgó vacaciones el pasado mes de enero, pero tal sorpresa se llevó que al momento de reintegrarse a su centro de labores el 31 de enero encontró su carta de despedida en su oficina.
Luego de ello, indicó que continuó asistiendo con normalidad y marcando su ingreso y salida en el sistema del hospital hasta el 13 de febrero, donde ya no está registrado sus datos, por lo que el mismo día acudió hasta la comisaría de Buenos Aires a denunciar eso.
Señaló que este hecho no habría quedado allí, ya que este viernes apareció un memorándum circulando por todas las áreas del hospital, donde les exige al personal de seguridad prohibir su ingreso a las áreas de medicina, ginecología, cirugía, pediatría y emergencia.
Además, señaló que el mismo memorándum se encuentra pegado por el área de telefonía, donde le ha señalado al personal que el sacerdote no puede usar los equipos para realizar ninguna oración, como diariamente lo realiza.
“Hay un memorándum donde se me prohíbe el ingreso a varias áreas del hospital, desconozco el motivo porque él mismo me dio vacaciones, entonces regreso y encuentro mi carta de despido, a mí me sorprendió pero seguí trabajando hasta el 13 que ya no figuraba mi código, yo comunicado a la policía para que constate el hecho”, señaló.
Manifestó, que seguirá acudiendo a la oficina de capellanía hasta que la Dirección le pida que se deje el ambiente, luego de ello procederá legalmente ya que sus 11 años que lleva laborando le dan la estabilidad en el puesto.
“Si me dan termino de contrato y sigo marcando me siguen acatando tengo continuidad de trabajo, tengo 11 años trabajando y eso me lleva a estar estable por derecho, no tengo ningún problema con él y me sorprende que actué ahora así, hasta ayer subía y bajaba y ahora me prohíben”, manifestó.
El sacerdote, señaló que esto es un hostigamiento para dejar el cargo, ya que al parecer quieren colocar al cargo a otro sacerdote.
“He visto al padre Fernando Asin, hablando con las asistentas, preguntando sobre mi trabajo, si vengo o no, este padre viene de la Diócesis, porque incluso me han dicho que habría otro sacerdote que vendría a ocupar este puesto, el monseñor debe saber, todo viene de allí, si están buscando un trabajo de capellán que vaya a La Caleta que allí si necesitan un sacerdote”, finalizó, Luis del Carpio.