Editorial

Editorial: ::: PUEBLO EXIGE SANCIONES :::

Cientos de pobladores de diversos pueblos jóvenes y urbanizaciones del distrito de Nuevo Chimbote salieron a las calles con la finalidad de demandar más acción a las autoridades en la abierta lucha contra la delincuencia, pues no solo crece la inseguridad sino también la impunidad, lo cual es mucho más delicado.

Premunidos de pancartas y entonando estribillos dirigidos a los responsables de la seguridad ciudadana, los manifestantes advirtieron que el distrito de Nuevo Chimbote ha vuelto a adquirir ribetes de inseguridad como nunca antes había observado, por el contrario, una de las características de la jurisdicción sureña era, precisamente, la seguridad que se respiraba en sus calles,

Y es que, tradicionalmente, el servicio de Serenazgo de Nuevo Chimbote surgió como una efectiva herramienta de seguridad que llegó para llenar ese enorme vacío que dejaba la Policía por la carencia de recursos logísticos y humanos, justamente, durante la primera gestión del alcalde Valentín Fernández Bazán se adquirieron las camionetas para el servicio de serenazgo y se implementó un servicio asistencial efectivo.

La intervención de los serenos no solo fue eficiente en el patrullaje de las calles sino en el apoyo y la asistencia de vecinos ante cualquier emergencia, siempre llegaban raudamente a los accidentes de tránsito, los incendios, los incidentes caseros, el vecino de nuevo Chimbote encontró un soporte eficiente en el serenazgo.

Este escenario era tan plausible que en determinado momento generó las envidias de otras instituciones que comenzaron a reclamar la intrusión de los agentes de serenazgo en el auxilio de heridos, algo que resultaba contraproducente en la medida que los resultados fatales en accidentes se evita, justamente, porque la premura en la asistencia de las personas es lo mas importante.

Sin embargo, los efectivos de los bomberos acusaban que la intervención fallida e inexperta de los serenos podría derivar en males mayores a los accidentados, por lo que la Municipalidad optó por capacitar a los agentes en primeros auxilios y en temas de asistencia médica de urgencia e implementó el servicio con una ambulancia.

En realidad resultaba chocante que se acusara a los serenos de su eficiencia para llegar de inmediato a las emergencias, como en el caso de los incendios, en la mayoría de los cuales eran los agentes del serenazgo los que llegaban mucho antes que los Bomberos y apoyaban a los moradores para impedir el avance del fuego, por ello se ganaron el respeto y el agradecimiento a este cuerpo de seguridad ciudadana.

Sin embargo, esto ocurrió hace algunos años atrás, cuando el serenazgo contaba con unidades nuevas y modernas, cuando las cámaras de vigilancia funcionaban en un 100% de su potencial y cuando el número de agentes era suficiente como para disponer de ellos ante las innumerables emergencias que se presentaban.

Hoy las cosas han cambiado mucho, el cuerpo de seguridad ciudadana ya no es el mismo no solo porque sus unidades se han deteriorado y la mayoría se encuentra en reparación en los talleres, porque las cámaras de  vigilancia no han sido remplazadas y porque la situación financiera de la propia comuna ha obligado a reducir el número de agentes que cubren el patrullaje por las calles.

Por ello es que la delincuencia ha vuelto a ganar terreno, los robos y asaltos son cosa de todos los días, los incendios y accidentes ya no reciben a los serenos con la inmediatez y eficiencia de antaño, ahora llegan pero mucho más tarde de lo acostumbrado, en fin, la inseguridad también ha vuelto a copar las calles de Nuevo Chimbote.

Aun cuando la Policía ha recibido más patrulleros inteligentes, aun no están en condiciones de apoyar la tarea de patrullaje en la dimensión y volumen que requiere nuestra ciudad, enj un distrito que ha crecido mucho y por ello es que la población advierte ese déficit y ha comenzado a tomar justicia por su propia mano.

Si esto ocurre con la inseguridad en las calles, otro tanto se registra con la necesidad de sanción contra los sujetos que son capturados en flagrante delito y que deberían ser enviados directamente a la cárcel, empero, los Fiscales se muestran exageradamente indulgentes con quienes se ponen al margen de la ley.

La gota que colmó el vaso de la paciencia de la población se registró hace solo unos días cuando un desviado sexual fue capturado luego que las autoridades fueran advertidas por vecinos del parque “Cristo Rey” que el sujeto estaba masturbándose en presencia de menores de edad, inclusive, señalaron que se trata del mismo sujeto que se aprovechó de la inocencia de una niña practicándole actos impúdicos.

José Edinson Torres Casana se llama el degenerado que, por increíble que parezca, fue liberado por un Fiscal que alegó que no hubo fragancia de delito porque el sujeto fue aprehendido cuando se daba a la fuga, así como consideraba que había cometido un hecho muy leve como para una medida de aprehensión.

Semejante y chocante decisión dio lugar a una reacción de otros sectores por la manera tan ligera e irresponsable como se administra justicia al dejar que nuevamente un depravado vuelva a acechar a las niñas en las calles, con el agravante que tras ser recapturado por otro delito, un Juez ha enviado al sujeto al penal de Cambio Puente al valorar los hechos que el Fiscal había minimizado.

Por ello es que el pueblo reacciona, cuando advierte que las autoridades no cumplen con su rol de defender a la sociedad, tanto así que los pobladores del A.H. “Los Constructores”, por ejemplo, decidieron hacer justicia por su cuenta, desnudaron a un ladrón sorprendido in fraganti, lo ataron en un poste y le dieron un duro castigo hasta que llegaron efectivos policiales y del serenazgo para rescatarlo.

La indignación de los pobladores llegó a tal extremo que no estaban dispuestos a quedarse de brazos cruzados viendo como los fiscales dejan en la calle a todos aquellos que capturan con las manos en la masa. Ese es el mensaje que nos ha dejado esta marcha de la semana pasada, la población ya dice basta a la delincuencia y la impunidad, exigen sanciones ejemplares y categóricas contra la gente de mal vivir que vive al acecho para quedarse con lo que otros consiguen con esfuerzo y mucho trabajo. Esperemos que la Policía y la Fiscalía hayan acusado recibo de este mensaje.