Apenas hace una semana la Ministra de Justicia, Marisol Pérez Tello, se supone que en nombre del gobierno central, había puesto en jaque a las autoridades ancashinas y había emplazado a que se reestructure el proyecto especial Chinecas bajo apercibimiento de ser nuevamente transferido al Ejecutivo, y ya el Gobernador Regional de Ancash, Luis Gamarra Alor, parece hacer dado un importante paso para evitar ese cometido.
Ello en razón que una de las poderosas razones por las cuales Pérez Tello y algunos altos funcionaros del ejecutivo mostraban sus dudas respecto al futuro de Chinecas se advirtió en la emergencia generada hace solo un mes y medio atrás por el fenómeno de El Niño Costero, cuando las lluvias, desbordes y deslizamientos hicieron estragos muchos pueblos y distritos del interior de nuestra provincia.
Esta emergencia se tradujo en bloqueos, asilamientos, escasez de alimentos, interrupción del transportes, etc., empero, uno de los problemas más serios que generó fue el desabastecimiento de agua en el distrito de Nuevo Chimbote, situación que llevó a la empresa Sedachimbote y el municipio de Nuevo Chimbote a tener que desplazar sus carros cisternas a efectos de repartir agua entre los moradores mientras se superaban los impases generados por la naturaleza.
Estos impases guardaban relación con la destrucción del canal del proyecto Chinecas que traslada las aguas desde la zona de Santa a Chimbote y en donde la empresa Sedachimbote capta el líquido elemento y los lleva a sus pozas de almacenamiento a efectos de procesarlo y suministrarlo a la población.
Como ya es de dominio público, la quiebra el canal de Chinecas dio lugar a que se interrumpa este sistema de captación de aguas y las autoridades mostraron su preocupación por este tema, pues el proyecto especial Chinecas no daba muestras de una efectiva reacción para su rehabilitación y hasta los agricultores deberían echar mano a sus propios recursos para habilitar algunos puntos de captación a efectos de no perder los cultivos que no fueron dañados por los desbordes y huaicos.
Sin embargo, para el abastecimiento de agua las autoridades debieron habilitar un sistema alterno a efectos de recoger los excedentes que llegan al canal Carlos Leight y de esta manera nutrir sus pozas de almacenamiento, inclusive, este líquido elemento presentaba altas concentraciones de sustancias que no solo hacían mas turbia el agua sino que, aun cuando era potabilizada, presentaba un extraño sabor que obligó a los pobladores a tener que utilizar el agua de mesa que ofrecen las empresas especializadas para el consumo personal.
Lo cierto es que esa situación de emergencia la vivió directamente la Ministra Marisol Pérez quien se desplazó hacia la zona donde se hizo un canal alternativo para almacenar agua y abastecer de manera restringida a la población, empero, también fue lo suficientemente sagaz como para advertir que Chinecas no caminaba para adelante ni para atrás en este tema cuando se trataba que ellos rehabiliten lo más pronto posible su canalización y se resolvía el problema.
Por ello es que la ministra se llevó una pésima impresión de la administración de este proyecto especial pues, como a la mayoría, no le cuadraba que ante una emergencia de esta naturaleza, en la que estaba de por medio el abastecimiento del líquido elemento la población, el proyecto especial Chinecas no fuera capaz de solucionar el problema en cuestión de días, por lo menos buscar una alternativa de urgencia.
Lo que vieron todos es que los funcionarios de Chinecas pidieron al seguro que cubra los daños de la infraestructura que está protegida bajo este régimen, lo que no está mal, empero, se apela a este mecanismo cuando no se tiene prisa o diligencia, cuando se puede esperar muchas semanas porque los siniestros se manejan de esta manera, empero, en el caso del abastecimiento de agua se requería de una alternativa diferente.
Por ello es que ante el emplazamiento de la ministra Marisol Pérez Tello el Gobernador regional Luis Gamarra ha procedido con la diligencia que requiere este tema y ha convocado de inmediato al Ingeniero Gastón Barúa Lecaros para que tome las riendas del proyecto especial y lo conduzca por la senda técnica que le corresponde, que deje de lado el clientelaje político y el manoseo propio de una burocracia anquilosada y que lo encamine para su pronta ejecución.
Quizás este es el aspecto más delicado que ha sopesado la ministra Pérez Tello durante las semanas que permaneció en Chimbote y en nuestra región como coordinadora de la emergencia en representación del Ejecutivo, es decir, que si Chinecas no contaba con una plana ejecutiva que fuera capaz de atender una emergencia de abastecimiento de agua por no poder asumir la quiebra del canal, entonces era virtualmente imposible pensar que pueda ejecutar un proyecto de irrigación que se encuentra postergado desde hace muchos años y que no tiene punto de comparación con su vecino del norte, como es Chavimochic que se nutre de las mismas aguas del río santa.
Es evidente que su lógica es acertada y ha permitido que se apuntale a las nuevas autoridades regionales para que se encamine este proyecto de irrigación con otro empuje y decisión, lo cual parece tener efecto inmediato con la designación de un profesional que conoce cuál es la realidad de Chinecas, que estuvo hace solo un año en el mismo cargo y quien debió renunciar porque quienes lo encumbraron en el mismo ni siquiera lo dejaban trabajar por el manoseo político y la intromisión en sus funciones.
Hoy Gastón Barúa tendrá todo el respaldo de un Gobernador que sabe lo que es la presencia de un técnico de polendas en una entidad que lo requiere, por ello es que se ha dado un primer y efectivo paso a los correctivos que demandó la ministra Marisol Pérez Tello y seguramente esta designación dará paso a que se recomponga el directorio, que también ha sido hasta el momento un cero a la izquierda en Chinecas.
Es importante que el gobernador Regional haya acusado recibo del real objetivo del gobierno al emplazarlo en el tema de Chinecas, la medida que ha dictado convocando al ingeniero Gastón Barúa pone de manifiesto que está enmendando rumbos en el manejo del proyecto especial Chinecas y, por lo menos, nos genera una situación expectante frente a lo que pueda venir para este caro anhelo de los ancashinos como la verdadera alternativa de desarrollo. Aguardemos no equivocarnos.