Ayer en el “Día del Maestro”:
Director de UGEL- Santa, Robert Iturria junto a docentes premiados.
Buscando reconocer su ardua labor en beneficio de la educación peruana en el “Día del Maestro”, celebrado ayer 6 de julio, la Unidad de Gestión Educativa Local del Santa, realizó un reconocimiento a más de 150 docentes de su jurisdicción por los logros obtenidos en más de 25 años de trabajo.
En esta importante ceremonia protocolar estuvieron presentes el director de la Ugel- Santa, Robert Iturria Huamán y el Subprefecto de Nuevo Chimbote, Milton Pinedo Ignacio y los docentes quienes llegaron junto a sus familiares a recibir el importante reconocimiento a su labor a favor del educando.
El director de la Unidad de Gestión Educativa Local de la Santa, Robert Iturria Huamán, reconoció la labor que desempeñan los docentes por el beneficio de los alumnos de la jurisdicción a pesar que actualmente muchos se encuentran laborando en instituciones educativas que se encuentran en malas condiciones.
“La labor de un docente no es cualquier labor, muchas veces sacrificamos muchas cosas, nuestras familias, nuestras vidas para entregarlas a nuestro trabajo de educar a pesar que actualmente muchos profesores trabajan en colegios que lamentablemente tiene muchos problemas en el aspecto estructural pero así siguen enfrentando todo por nuestros niños y adolescentes”, precisó.
Luego de ello, con Resolución Directoral Nro. 4201- 2017, se reconoció con la medalla y diploma de honor a 75 docentes con 25 años y 38 profesores con 30 años de servicios.
Asimismo, se reconoció a 27 docentes de varias instituciones educativas que obtuvieron mejores resultados en la última Evaluación Censal de Estudiantes 2016 (ECE), a 16 profesores ganadores del programa del Ministerio de Educación “Escuela Valora” y 3 maestros por haber obtenido un mejor desempeño en el año
La subdirectora de la Institución Educativa 88017 “Cesar Vallejo” ubicado en Primero de Mayor, Dexi Córdova Díaz, condecorada con 25 años de servicio en la docencia, señaló que ser maestro en el Perú es una vocación sacrificada pero a la vez muy gratificante que se ve reflejado en el entusiasmo que ponen los escolares al acudir cada día a sus centros educativos.