Editorial

¡POR FIN PARIÓ PAULA!

Las principales autoridades de la provincia del Santa y el propio Gobernador Regional Luis Gamarra Alor, fueron convocados la semana pasada por el Director Ejecutivo de la Reconstrucción con Cambios, Pablo de la Flor, y fueron informados del próximo inicio del proceso de rehabilitación de los graves daños que ha dejado el fenómeno del “Niño Costero” en los primeros meses del año.

De acuerdo a la información proporcionada por las mismas autoridades, finalmente el organismo encargado por el Ejecutivo para que maneje los recursos y los procesos de ejecución de las obras en todo el país, ha señalado que se ha determinado la asignación presupuestal de 3,500 millones de soles para la región Ancash y se ha previsto que los trabajos se iniciarán en el mes de octubre.

Este presupuesto será destinado a las obras de defensa ribereña, rehabilitación de colegios, reparación de puentes destruidos, para los hospitales deteriorados, así como para la rehabilitación de pistas y veredas en los pueblos más afectados, entre los cuales se considera, obviamente, a la provincia del Santa y sus distritos del interior.

De acuerdo a lo que se ha informado a los medios de comunicación todo este movimiento impresionante de recursos que se pondrá en marcha derivará en la generación de unos 25 mil puestos de trabajo, lo que quiere decir que de alguna manera la economía regional observará un repunte ante la recesión que padece desde hace años.

Lo importante es que ya existe un cronograma de trabajo, se han especificado los montos para cada rubro que se debe atender, por ejemplo, se está destinando 1,500 millones de soles para la rehabilitación de puentes y carreteras destruidas, en la cual se ha incluido el trazo de Casma – Huaraz que ha sufrido un gran deterioro como consecuencia de las intensas lluvias del mes de marzo.

De la misma manera, se ha considerado un presupuesto de 500 millones para la infraestructura de los colegios, entre los cuales uno de los más afectados ha sido la institución educativa “Villa María”, también se ha destinado 358 millones de soles para los hospitales, entre los cuales se destaca la rehabilitación del nosocomio de Huarmey que terminó virtualmente bajo el lodo.

Finalmente, se ha considerado 300 millones de soles para las obras de saneamiento, como agua y alcantarillado, mientras que 200 millones se destinará al resane de las pistas y veredas que fueron afectadas por la acumulación de agua que dejaron las lluvias y los desbordes de los ríos.

Con excepción de las obras de descolmatación de ríos y construcción de defensas ribereñas, las cuales ya se han iniciado y tienen  prioridad por el aspecto de la prevención, las demás obras deben estar iniciándose en el mes de octubre, luego que se determine como se ejecutarán las mismas y la intervención que tendrá cada uno de los órganos de gobierno, es decir, los municipios y el gobierno regional.

Aun cuando muchos piensen que este es un tema menor, lo cierto es que es uno de los aspectos que generan entrampamientos y mucha polémica, tal como ha ocurrido, por ejemplo, en la región Piura en donde los mil quinientos millones que ha depositado el erario nacional para que se inicien los trabajos de la reconstrucción no han sido retirados ni manejados hasta el momento por la disputa de las autoridades por la disposición del dinero.

Y es que, a pesar de la desgracia y de los terribles resultados de los fenómenos climatológicos, aun cuando existen miles de familias que viven a la intemperie y otras que esperan un apoyo para poder levantarse nuevamente, la ambición de las autoridades llega a extremos porque se sabe que cuando se ejecutan esta clase de obras existe de por medio un aliciente que es el que, aparentemente, generan estas controversias.

Aun cuando el discurso de quienes están al frente de este proceso diga todo lo contrario, se sabe que este es el quid del asunto y llama la atención que en esta primera visita y diálogo que han sostenido las autoridades de la provincia el Santa con el Director Ejecutivo de la autoridad de la reconstrucción con cambios no se haya precisado nada respecto a este asunto, por lo menos no lo han divulgado a los medios de comunicación.

Y es que no puede dejar de generar preocupación este aspecto si se tiene en cuenta los primeros hallazgos que ha hecho la alcaldesa provincial del Santa en los trabajos de des- colmatación que ya se vienen ejecutando con recursos de Agrorural, que es un programa del Ministerio de Agricultura, pues se ha detectado que los mismos son deficientes y han generado serios problemas de infiltraciones en dos sectores de Chimbote.

La alcaldesa Victoria Espinoza García ha elevado su voz de protesta, ha convocado a los organismos de la sociedad civil y ha llevado esta preocupación al mismo portafolio de Agricultura, cuyo titular dispuso que el ultimo viernes viaje a Chimbote el Presidente Ejecutivo de Agrorual y atienda en el mismo lugar de los hechos estas denuncias, empero, el último fin de semana no llegó dicho funcionario.

Esto que aparenta ser un desaire o la tradicional indiferencia de la burocracia dorada y gubernamental hacia las inquietudes provinciales, pone de manifiesto un comportamiento que contribuye a estos dislates que se registran en el manejo presupuestal de las obras que se deben ejecutar, de allí que se tiene que hilar muy fino cuando se trate de delegar funciones y transferir presupuestos, por lo menos se debe considerar la presencia de organismos fiscalizadores para evitar inconvenientes en el futuro, esencialmente, para que no se retrasen estas obras que se esperaban desde hace mucho tiempo.

Hay que tener en cuenta que el gobierno no solo se ha tomado su tiempo para poner en marcha la reconstrucción, creemos que se ha tomado demasiado tiempo al extremo que ya muchos pensábamos que esto de la reconstrucción con cambios era otro cliché más de una gestión que solo da muestras de zozobrar en un mar político demasiado agitado en el país, de allí que tras el anuncio realizado por las autoridades la semana pasada muchos llegaron a gritar ¡por fin parió Paula!, y ello porque estas obran son las más esperadas de los últimos tiempos, representa el paso necesario para derrotar a las inclemencias de la naturaleza que, una vez más, se ensañaron con muchos pueblos de nuestra provincia. Esperemos que el camino de la reconstrucción se vaya abriendo paso sin piedras que lo interrumpan.