Editorial

EDITORIAL ::DEGENERACIÓN JUVENIL::

Agentes de la división de delitos de alta complejidad y de alta Tecnología se llevaron un menuda y desagradable sorpresa la semana pasada cuando llegaron a intervenir a un pervertido que estaba acosando a una menor de edad y por ello planificaron una celada para capturarlo, sin embargo, se encontraron con un adolecente de apenas 16 años de edad.

Pese a su corta edad este adolescente manejaba cuentas de facebook en las cuales perseguía a menores de edad para chantajearlas sexualmente con las fotografías que ellas mismas le enviaban en situaciones sugerentes y aprovechando no solo la inocencia de aquellas sino el temor frente a las amenazas que le hacia llegar.

El menor había acudido hasta las inmediaciones del Policlínico Belén citado por un efectivo policial que se hizo cargo de la cuenta de menor, cuya madre había denunciado en la Comisaría San Pedro el acoso del cual era víctima su menor hija por parte de un desconocido.

Ocurre que la menor de apenas 11 años no era la única víctima de este delincuente juvenil, por el contrario habían identificado 14 cuentas que el sujeto había intervenido y acosaba a sus victimas por lo que su equipo celular y su ordenador informático resultaban claves en esta investigación.

En efecto al revisar sus pertenencias de encontró un celular y una laptop las cuales contenían nada menos que 842 fotografías y más de un centenar de videos de menores a las cuales ya había extorsionado, razón por la cual con el parte de investigación lo puso a disposición de la Fiscal de Familia que a su vez lo ha remitido a la Juez que ha dispuesto su internamiento en un albergue de menores con la determinación que sea sometido a una terapia psicológica.

Ahora bien, como entender que un menor de 16 años pueda haber emprendido una actividad delincuencial propia de mafias que se dedican a la trata de menores, organizaciones que se lucran amenazando a niños y aprovechándose de su candorosidad, empero, fundamentalmente de la absurda presencia de menores en la red social.

De nada vale repetir que las redes sociales representan la revolución de las comunicaciones, permite a las personas comunicarse en tiempo real y para ello ha desarrollado mecanismo que facilitan la interacción de dos personas, una de las cuales es el facebook que como el twitter y el Instagram, que son herramientas eficaces para transmitir algo.

Por ello es que estas mafias aprovechan la red social para lanzar sus anzuelos, crean falsas páginas y cuentas para disfrazar su identidad, para entablar un dialogo y de inmediato hackear la clave para poder hurgar toda la información de su potencial víctima.

De esa manera saben que están ante una menor cuya primera sensación es el miedo y temor, las amenazan para que no digan nada a sus padres y las obligan a tomarse fotos o hacer videos de alto contenido sexual.

Estos degenerados venden las imágenes a las mafias que trafican con ellas, sin embargo, aprovechan que ya hicieron el contacto con la menor para chantajearla, para obligarla a obtener dinero y se los entregue o para abusar de ella.

Sin embargo, ¿podemos sostener que todo esto es consecuencia del uso indebido de las redes sociales, de la habilidad de estos pervertidos para manejar las herramientas informáticas para establecer contactos con sus víctimas? . Evidentemente que no.

No se puede culpar solo a las redes sociales de esta clase de vínculos perniciosos con las menores de edad, también está de por medio la responsabilidad de los padres para controlar los contactos y los contenidos de las cuentas de sus hijos, su decidida intervención para evitar el acoso de estos delincuentes.

Nos preguntamos ¿Qué hace una menor de 11 años de edad manejando una cuenta de facebook y exponiéndose al accionar de estos enfermos que pululan por las redes sociales? ¿Es correcto que una niña que no conoce los peligros de la calle establezca contacto con desconocidos a través de las redes sociales?.

Aun cuando en este caso en particular la madre haya sido quien denunció ante la Policía que su menor hija venia siendo acosada por un pervertido y que ello hizo posible que se tendiera una celada para poder descubrir al sujeto que la chantajeaba, lo que debió hacer esta mujer es evitar exponerla a un serio riesgo manteniendo una cuenta de facebook pese a su corta edad.

Los padres de familia están advertidos de lo que representa la red social, los medios de comunicación hemos difundido una serie de casos de ultraje en los cuales la menor ataviada ha sido contactada a través de las redes sociales y aun así permiten que sus hijos menores se mantengan en el facebook bajo el pretexto que “mi niña sabe que tiene que avisarme cuando un desconocido la aborda”, lo cual no es totalmente cierto.

No entienden estos progenitores que la curiosidad siempre le ganara el juicio a una persona y especialmente cuando se trata de un menor, ellos no tienen capacidad de discernimiento, de allí que esta clase de hechos o esta clase de delincuentes solo se evitan con la prudencia y la sensatez de los progenitores, no hay otra manera de prevenir, no hacerlo es exponer a los niños ante estos maleantes.

Esto es mucho más necesario si advertimos que hay una degeneración juvenil, adolescentes huérfanos de valores pero a los que su corta edad nada los detiene en involucrarse en estas actividades delictivas, ni siquiera porque se trata de delitosa que tienen sanciones sumamente severas.

En consecuencia, frente a hechos como el sucedido y ante casos anteriores en los cuales se ha llegado a consumar el abuso, no existe otra forma de control que aquella que está en nuestras propias manos, no permitamos que nuestros niños resulten fácil carnada para estos pervertidos, hay que prevenir antes que presumir.