Editorial

CUENTA PENDIENTE

Los comerciantes del mercado Buenos Aires han decidido ampliar el horario de atención al público hasta las 7.00 de la noche con la finalidad de recuperar no solo el tiempo perdido sino de aliviar su situación económica luego de haber soportado 15 días de cierrapuertas debido a la clausura ordenada por la Municipalidad Distrital de Nuevo Chimbote.

Esta es la primera medida que han adoptado luego del doloroso proceso de cierre que se registró en las dos primeras semanas de este mes y luego que la comuna distrital levantara el veto a pesar que aún no han culminado las obras que se realizaban al interior de este centro de abastos.

Sin embargo, el proyecto se ha avanzado poco más de un 90%, tal como se ha podido advertir aun resta la colocación de cerámica en una parte de los puestos del mercado y acabados menores que han desvirtuado la situación de riesgo que generó la medida radical adoptada por la comuna distrital.

Inclusive, la autorización se dio en el marco de una inspección en la cual los funcionarios requirieron que se elimine toda posibilidad de accidentes, de tal suerte que en aquellas partes en donde no se ha podido colocar los pisos de cerámica, exigieron que se hagan acabados de emergencia en las partes que sobresalen del falso piso.

Lo importante para los comerciantes y los usuarios es que se hayan reabierto las puertas tras una medida que, aun cuando es legal y justificada, ha levantado mucha polémica en razón que se aduce el problema social que se genera cuando hay necesidad de trabajo y nos acercamos a una fecha en la que el comercio es indispensable.

Esto último es cierto, las fiestas de fin  de año son una alternativa económica para los comerciantes que trabajan duro todo el año para cerrar con un plus en el mes de diciembre, empero, ello no puede ser argumento para no cumplir y respetar las normas y las obligaciones de quienes realizan una actividad económica.

La autoridad municipal y menos aún las amas de casa no tienen la culpa que los comerciantes se hayan relajado a lo largo de muchos años sin ejecutar un solo trabajo de mejoras tal y como lo exigía la autoridad, no hayan previsto el cambio de su obsoleto sistema de alcantarillado, no hayan garantizado un buen sistema de cableado.

Si la memoria no nos falla lo único que hicieron los comerciantes es mejorar el techado, eliminar los viejos y maltratados canalones que se colocaron cuando se construyó este centro de abasto, para colocarle material nuevo que garantice la seguridad de las personas, incluso, este trabajo se ha extendido hasta lo que se conoce como zona de ampliación.

Pero ello no era suficiente, los comerciantes fueron una y otra vez notificados de las mejoras que deberían ejecutar para que se cumpla  con las normas de seguridad y salubridad y no lo hicieron en su debido momento, solo cuando se vieron desesperados ante una orden inminente de cierre se vieron empujados a contratar a una empresa para que ejecute el cambio del sistema de agua y alcantarillado y coloque nuevos pisos con los moldes modernos de cerámica y con acabados que resulten beneficiosos para los usuarios.

Sin embargo, estos trabajos se deben efectuar con empresas especializadas y con experiencia, cualquier contratista no puede ejecutar un trabajo de estas características en medio de puestos que venden alimentos y comidas, la seguridad es indispensable, empero, los comerciantes recurrieron a una empresa que no garantizó absolutamente nada y por ello la autoridad se vio precisada a clausurar el centro de abastos hasta que se concluya con esta obras que ponía en riesgo la integridad de las personas.

Afortunadamente ya se ha superado la emergencia, el mercado ha reabierto sus puertas aun cuando los trabajos no han concluido, está aún pendiente la colocación de pisos en un tramo y todos los usuarios esperan que esto no quede así, que finalmente se concluya el trabajo porque aquella parte en donde se ha culminado los trabajos presenta otro aspecto y una mejor vista, brinda comodidad e higiene a los usuarios.

Solo queda saludar el esfuerzo que han realizado los comerciantes para poder presentar un mejor servicio a los usuarios y pedirle a las autoridades que no cejen en demandar que los trabajos no queden a medio hacer, que se concluyan porque el centro de abastos luce mucho mejor en la parte que han concluido los pisos.

HONOR AL MÉRITO

Muchos ni siquiera se imaginaban que uno de los grandes compositores que tiene nuestro país y que son autores de canciones emblemáticas como “Huanchaquera” son paisanos nacidos en esta bendita tierra de promisión.

Se trata de Máximo Alberto Haro Haro, un Chimbotano que desde muy joven viajó a Lima en donde desarrollo sus habilidades para la música y se confundió con grandes autores y compositores de la época, por lo que destacó en ese rubro.

Justamente, cuando Chimbote cumplió 100 años como puerto mayor, allá por el año 1971, el entonces joven compositor decidió dedicarle unas letras a su entrañable tierra y escribió “Huanchaquera”, un vals que rápidamente se convirtió en un himno que resalta la identidad cultural de nuestra ciudad.

Hoy a sus 91 años, aún muy lúcido, Don Alberto recuerda aquellos años mozos en su Chimbote querido, por ello la alcaldesa provincial del Santa, Victoria Espinoza García, con acertado criterio, decidió otorgarle la medalla la ciudad con ocasión del 11 aniversario político de la ciudad que se ha celebrado la semana pasada.

Debido a los achaques propios de la edad, Don Alberto ya no pudo llegar a nuestro puerto y fueron sus hijos los que recibieron este reconocimiento que es justo y merecido para quien jamás olvidó sus raíces e hizo uso de su habilidad y destreza para componer una de las canciones más queridas de los chimbotanos. Esperamos tenerlo aún muchos años más, por lo pronto no podemos dejar de escuchar las alegres tonalidades de “Chimbotera, Huanchaquera ……”. Salud por Don Alberto Haro.