COMENTARIO:
“Ninguna Comisión de Justicia podrá borrar ese gravísimo error cometido”. Son palabras textuales que dejó el presidente de la Lidefa Luis Duarte Plata en la charla que mantuvimos el miércoles al medio día, sobre el tema del día que era el reclamo de José Gálvez.
Esa es la realidad nadie puede borrar, como por arte de magia, ese grosero error de la dirigencia galvista como ellos han pretendido hacerlo sin tener en cuenta el reglamento, sin tener en cuenta la legalidad deportiva vigente en la actualidad.
Ellos los administradores galvistas se dieron cuenta que habían cometido el error cuando iba a terminar el primer tiempo del partido ante Atlético Bruce. Allí se dieron cuenta que no habian revisado el DNI de uno de los jugadores juveniles que llegó como refuerzo. Es inaudito pero fue la realidad, que hasta hoy no la han querido reconocer, es como si con ellos no fuera, están en otro mundo.
Pero al margen del error de no haber tenido a un delegado, a una persona experta que conozca el manejo de la Copa Perú, después de producirse los hechos el domingo 20 siguieron en las mismas y es más se sumaron a ese grupo Julio Peñaranda y su gente y agravaron más el tema porque en lugar de haber reclamado en esas 24 horas lo hacen tres días después.
Es decir, si los administradores de Sfera no conocen el manejo de la Copa Perú, se entiende que Peñaranda y su gente si lo saben, pero reclaman tres días después cuando el uso de propaganda política está penado y ahora Atlético Bruce estaría fuera de competencia, pero esta vivito y coleando gracias a la mediocridad e incompetencia de la dirigencia galvista.
Los resultados se grafican en la resolución 004 que publicamos en esta pagina y no hay palabras mejores que las que allí se pueden leer. Lo que ellos presentaron fue extemporáneo y fuera de lugar como ocurrió con la nulidad.
El error no lo puede borrar nadie y quedará agendado para la historia allí, como para que nadie vuelva a cometerlo, para que todos los participan en la Copa Perú sepan que primero son los reglamentos y luego el delegado y después lo que quieran el presidente, el entrenador y los jugadores.
José Gálvez ha mordido el polvo de la derrota y lógicamente este grupo de jugadores que estaban formándose no tienen la culpa de nada, por el contrario buscarán su mejor destino y muchos de ellos seguirán en competencia porque son capaces y tienen recursos técnicos y físicos para destacar. No vamos a singularizar a nadie sino que las palabras son para todos ellos. Ellos no tienen la culpa de la gente que manejaba el club que fue incapaz de hacer las cosas bien.
Finalmente, el suscrito, preguntó en la primera y única conferencia de prensa que hicieron los administradores, sobre el delegado y el representante legal, Jesús Álvarez, el responsable de todo lo ocurrido, pues es el jefe, respondió con soberbia que ellos tenían un staff de abogados para resolver los problemas. Los resultados nos indican que su staff de abogados no sirvió para nada, más bien dieron lástima, sino lean todas las resoluciones de este caso. Además, no hizo mea culpa pues no acepta ser el culpable de la derrota.
La hinchada galvista recibió expectativas que no eran realidad, eran solo humo. Esperamos que en algún momento, llegará alguien para que puedan hacer realidad el sueño de volver al fútbol profesional, los sufridos hinchas lo merecen. (WPO).