DESORDEN
Tras la fiesta central de San Pedrito el desorden y la inseguridad fueron los factores que predominaron en las calles. Si bien es cierto que este año las familias se volcaron al centro de la ciudad y compartieron las muchas ofertas que hubo en las calles, la Feria Popular se vio virtualmente desbordada y sus espacios laterales estuvieron invadidos de toda clase de ambulantes que colocaron plásticos y se colocaron en donde pudieron. El desorden era evidente, obstaculizaban el paso de las personas, si bien es cierto que la oferta de stands fue insuficiente, los ambulantes no pueden invadir las calles de esa manera. Lo que ocurrió en la Plaza de Armas fue mucho peor aún, se vio totalmente invadida por ambulantes y en esta oportunidad ya no se vieron tantos comerciantes en las avenidas Manuel Ruiz y Elías Aguirre como en otras oportunidades, ahora todos se trasladaron a las primeras cuadras de la avenida Pardo y por ello la cosa estuvo a punto de estallar. Quienes acudieron a acompañar la procesión de la imagen del Santo Patrón, la noche de anteayer viernes, fueron testigos de todo esto, se encontraron con una serie de informales que no dejaban ni siquiera caminar. Ya la Policía Municipal había abandonado su deber, no pudo con tanta gente como lo dimos cuenta en nuestra edición de ese día y lo único que hicieron fue abrir paso para que pase la procesión de salida de su templo y dejar que los ambulantes retornen porque era tal la cantidad que se hacía imposible reubicarlos. En años anteriores la Feria Popular ha sido un atractivo por ello atrae tanto público como se vio la noche del viernes, pero la invasión de las calles aledañas ha sido perjudicial. Esperemos el otro año los puedan controlar.
CONVALESCIENTE
No vale enfermarse. Este aforismo se utiliza generalmente para desearle buena salud a las personas y evitar algún catarro o males pasajeros que nunca faltan pero que indisponen a cualquiera para alguna labor, actuación o diligencia. Pero resulta que ahora debe tenerlo muy en cuenta el Presidente de la Asociación de comerciantes del mercado modelo, Don Marcial Terrones Córdova, cuya ausencia en el centro de abastos por espacio de un mes a consecuencia de una enfermedad generó toda una revolución y una serie de incidentes y enfrentamientos entre los comerciantes. Ello porque la natural ausencia de una persona por razones de salud no debería generar sino un remplazo eventual en sus funciones hasta que retorne al cargo, empero, en el Modelo hay quienes vieron la oportunidad de serrucharle el piso al antiguo dirigente y, lo que nos parece increíble, a esta suerte de conspiración se sumó nada menos que su abogado, Alex Quiñones Álvarez, según dio cuenta la última información en la que el curtido dirigente dio cuenta de su retorno al cargo. Ocurre que un grupo de comerciantes de su misma junta directiva no quisieron esperar la convalecencia de Terrones y lo quisieron desbancar nombrando a remplazantes y tomando el manejo del mercado a su voluntad, lo que generó la reacción de comerciantes que, como es natural y legal, exigía que cualquier transferencia de cargos se haga por los canales que corresponden, es decir, que es una potestad de la asamblea y no de un acuerdo de la dirigencia. En medio de esta batahola reapareció Marcial Terrones para poner orden, para anunciar su retorno una vez que se había mejorado de sus males y para descubrir a quienes traicionaron su confianza. La verdad es que en esta vida ya no vale enfermarse sino cualquiera se aprovecha y te perjudica.
MANOS
Las enfermeras de la Posta de Salud de Santa han apelado a las coreografías con la finalidad de llamar la atención de los ciudadanos ante la necesidad de echar mano a la prevención de los principales males que nos aquejan. Un grupo de ellas sorprendió bailando al ritmo de las canciones de moda delante de un cartel que hacía alusión a la necesidad de lavarnos las manos para evitar el contagio de enfermedades. Tras el número que presentaron explicaron a los periodistas que era necesario que la población tome en cuenta la importancia de lavarse las manos, no solo cuando uno se levanta o va a comer, sino de manera constante cuando realizamos nuestras actividades diarias porque lo que se tiene que tomar en cuenta es que cuando se coge cualquier cosa, incluso cuando se saluda a una persona que arrastra un problema de salud, nos contagiamos de virus y bacterias que ingresan a nuestro puerto a través de nuestras propias actividades, incuso cuando nos cogemos la boca, la nariz o cuando nos restregamos los ojos. Un simple lavado de manos con jabón y se termina cualquier riesgo o peligro, por ello es necesario tomar en cuenta esta recomendación y que bueno que las enfermeras nos lo hagan conocer moviendo el esqueleto. Vale.