La suerte de Los Turrys estaría echada
Rostro totalmente desfigurado del árbitro Ticona Pacheco. Fue agredido antes de entrar al camarin al finalizar el primer tiempo.
Policía llevó a comisaría a presidente de Los Turrys,pero árbitro no reconoció al agresor.
Cuando los jugadores no pueden en el campo y los dirigentes terminan por embarrarlo todo, esa parece ser la lamentable historia del duelo de ayer donde el elenco de Los Turrys perdían como locales por 1 a 0 ante Centro Unión Carrizal, y la agresión de uno de los integrantes del cuadro chimbotano sobre el árbitro del partido terminaría con la ilusión de avanzar en esta Copa Perú.
Al finalizar los primeros 45’minutos, la terna en cabezada por Juan Ticona Pacheco se dirigía a su camarín, los mismos que eran custodiados por los efectivos policiales, sufrieron la agresión de parte de uno de los dirigentes del cuadro local. El que dio aviso de los hechos fue el volante de Carrizal, Mario Monzón quien salió del túnel gritando de la agresión al árbitro, fue en ese momento que los efectivos policiales ingresaron al túnel y se la emprendieron contra el presidente de Los Turrys, Renato Infante, a quien al parecer estaba siendo sindicado por los policías de haber cometido la agresión, pero Infante en todo momento repetía que no había hecho nada, incluso los efectivos lo llevaron hasta el camarín de los árbitros para confrontarlo, pero luego fue dejado de lado.
Cuando parecía que el juego se iba a reiniciar, dos efectivos policiales subieron al palco y le pidieron al presidente del campeón chimbotano que los acompañe, mientras que todos aguardaban por la salida de la terna. Los Turrys estaban en el campo, los casmeños moviéndose en el interior del túnel aguardando la salida de los árbitros, los mismos que nunca salieron.
Pasaron más de 25’minutos, con ambos en el terreno de juego, la terna nunca salió, todos salieron por la puerta principal del escenario y el agredido fue evacuado a un nosocomio local para que sea evaluado y atendido por la herida que tenía en la nariz.
Hasta ahí se conocen los hechos, según se supo, el árbitro realizará su informe de todo lo sucedido, ya que el partido quedo suspendido. Dicho informe pasará a la Comisión de Justicia de la Liga Deportiva Departamental de Fútbol de Ancash (LIDEFA), que será el ente que resolverá este hecho violento.
Al cierre de esta edición nuestro Diario supo que el árbitro fue atendido en la clínica San Pablo y que le habían diagnosticado rotura de tabique nasal. Tenía además tal como se muestran en las fotos hematomas en el ojo izquierdo producto de los golpes recibidos.
Así mismo el árbitro en la comisaría de La Libertad donde fue llevado luego de haber pasado por la clínica, en su manifestación no identificó al agresor.
EL PARTIDO
Así como terminó, de la misma forma lo hizo el equipo, jugó uno de sus peores partidos de la temporada, un equipo sin ambición, pensando en que el resultado los favorecía, eso sumado a la temprana y tonta expulsión de Carlos Rojas por agresión a un rival. Al equipo de Falconi parece lloverle sobre mojado.
Pero aún con la desventaja numérica, los visitantes tampoco fueron muy peligrosos, no fueron tan agresivos como se esperaba, por lo que Falconi se apuró en el cambio, o mejor dicho se equivocó en el cambió al prescindir de un delantero que si bien es cierto no era tan determinante en el juego, pero por lo menos tenía ocupado a los zagueros contrarios, mientras que el llamado a salir era Cañizales quien antes de los 15’minutos había perdido todas las pelotas que tuvo, nunca fue salida por su banda, y el ingreso de Rengifo no le dio seguridad a la defensa, es más, se ganó una amarilla de manera fácil.
Pero los casmeños cada vez se animaban más, la paciencia fue su mejor virtud y ante un tiro de esquina, Adrianzen rechazó corto y el balón fue tomado por Jair Gutiérrez quien de un violento disparo venció la resistencia de Alcalá que ayer tampoco se mostró tan seguro y sufrió la caída de su arco a los 39’minutos de la parte inicial.
Pero Los Turrys reaccionaron y pegaron dos pelotas en el travesaño, la fortuna no estuvo de lado de los chimbotanos, y para colmo de males, fueron protagonistas del hecho violento que los podría dejar fuera de competencia, por ahora su lucha se trasladó a la cancha de los dirigentes, quienes ojalá puedan jugar mejor que los propios jugadores, aunque después de lo visto ayer parece que andan en la misma sintonía.