VENGANZA
Cuando nos aprestábamos a escribir esta columna llega la información de la capital de la república que da cuenta de la decisión del juez supremo de Investigación preparatoria, Hugo Nuñez Julca, quien ha decidido anular, a pedido de parte, el indulto concedido al ex presidente de la república, Alberto Fujimori Fujimori, y, por tanto, ha ordenado su captura e internamiento en el centro de reclusión en el que se hallaba antes de concedérsele la gracia presidencial. ¿Es esto correcto? ¿Es legalmente permitido? ¿Puede un juez hacer tabla rasa de la Constitución apelando al control constitucional? En realidad es lamentable que el país se vea envuelto nuevamente en una espiral de inestabilidad que es lo que generará esta descabellada medida extrañamente sancionada ad portas de un proceso electoral. El indulto es una figura jurídica contenida en la constitución y que corresponde única y exclusivamente al presidente de la república, al titular del poder ejecutivo. Es una atribución del jefe de estado para dictaminar una circunstancia judicial que se define como el perdón de la pena que se ha impuesto a un condenado por la justicia. No está sometido al veredicto ni de la autoridad judicial que condenó y menos de alguna otra autoridad que asuma el caso en ejecución. La Constitución Política, en su art. 118 Inc.) 21, establece, “Corresponde al Presidente de la República: Conceder indultos y conmutar penas. Ejercer el derecho de gracia en beneficio de los procesados en los casos en que la etapa de instrucción haya excedido el doble de su plazo más su ampliatoria”. Por tanto, es una decisión que solo le compete al Presidente de la Nación, solo él puede revocarla, inclusive, si se ha expedido al margen de las normas o en flagrante violación de la propia Carta Magna, entonces tiene que responder por ello, debe ser denunciado y acusado como lo manda la Constitución, empero, nada de ello ha ocurrido como para anular el indulto. Hay que tener en cuenta que la Constitución prevalece sobre toda norma legal; sobre la ley, sobre las normas de inferior jerarquía, y así sucesivamente, por tanto, anular un indulto vía ejecución de sentencia es lesionar la carta magna. No se puede actuar bajo presión, no se puede caer en el despropósito aquel que por que a la Corte Interamericana no le gusta se tiene que hacer lo que ella disponga. Es una pena que esto ocurra cuando en el país se esperaba que se sancionen los proyectos de reforma política y constitucional para que se sometan al veredicto ciudadano del referéndum, esta decisión irregular del juez Supremo solo pondrá muchas mas piedras en el camino en ese cometido y, como no podría ser de otra manera, mucha más inestabilidad para el país.
HUACHAFOS
Los candidatos cierran sus campañas con campañas mediáticas realmente pobres y limitadas. Esto atenta contra sus intenciones de llegar al electorado, empero, es evidente que es la resultante de una campaña absurda y cretina de ciertos sectores de la prensa que ha llegado al extremo de identificar una campaña publicitaria de un candidato con la corrupción. Si el candidato colocaba grandes paneles o realizaba innumerables pintas lo emplazaban a decir de donde sacaba el dinero. Si el candidato salía en caravanas y colocaba anuncios en la radio, televisión y peptídicos le exigían revelar como podía hacer esto. Ahora resulta que la inversión es igual a corrupción, llegaron al extremo de señalar que se estaban hipotecando a empresarios y negociando las futuras obras. Esta gente en realidad no conoce lo que es el marketimg político, no sabe que un candidato lo que tiene que hacer es vender su propuesta, tiene que mostrarse para que la gente lo identifique, tiene que ofrecer su símbolo o número según sea la modalidad de elección, tiene que llegar de manera masiva a la población y para ello tiene necesariamente que invertir. Y esto no es delito, no se puede pensar que poner dinero para postular es un acto de corrupción, eso es una huachafería que ha condenado este proceso electoral a las redes sociales, un medio de comunicación que no llega totalmente como los medios de comunicación masivos. Es lamentable pero llegamos al proceso electoral con ciudadanos que ni siquiera conocen a más de tres candidatos en su jurisdicción y esto es culpa de estos mensajeros de la mediocridad.
PANDEMONIUM
La ejecución de las obras de rehabilitación de pistas y veredas en la urbanización Buenos Aires, las cuales se ejecutan después de 40 años, ha coincidido lamentablemente con las elecciones municipales y regionales, es decir, con la campaña electoral. Por ello es que el cierre de campaña de los candidatos que se viene realizando en estos días y concluye el día de hoy jueves, involucra la realización de mítines que han dado lugar al cierre de calles y si a esto se suma el cierre de calles por los trabajos de pavimentación ya se imaginan el pandemonium en el que se han convertido las calles de Buenos Aires. Esto es más elocuente en las horas punta, en donde las colas y los embotellamientos desnudaron las falencias de las autoridades para disponer el control con la Policía de Transito y los propios inspectores del área de transporte del municipio distrital que pudieron colaborar para que se ponga orden.