Editorial

Editorial: ::: GRAVÍSIMO HALLAZGO :::

La Fiscalía anticorrupción incursionó el pasado fin de semana en las oficinas de la Sub Región Pacífico con la finalidad de incautar documentación que estaría relacionada con la tramitación de 19 obras fantasmas, es decir, que habría de por medio la sustracción de cifras millonarias cuyos montos no han sido hasta el momento revelados.

La intervención del Ministerio Público obedece a una auditoría realizada por personal de la oficina regional de la Contraloría General de la República que  hace unas semanas llegaron a la unidad subregional para realizar una auditoría en todas las áreas con la finalidad de recopilar información de todas las obras realizadas en las gestiones de los años 2010- 2018.

Tras la revisión del acervo documentario de la Sub Región Pacífico se detectó graves irregularidades en las asignaciones presupuestales para obras que no existen, por lo que se habría realizado la denuncia correspondiente ante la Fiscalía Anticorrupción del Santa, que ha procedido incautar todo tipo de documentación correspondiente a estas 19 supuestas obras “fantasmas” con la finalidad de poner a buen recaudo las pruebas.

Uno de los hechos que ha llamado la atención a los auditores del organismo de control es que en la propia dependencia regional no habría entregado toda la documentación solicitada sobre las obras ejecutadas en la anterior gestión de Luis Gamarra Alor, es más algunos de los documentos solo eran unas copias simples, que no contaban con la información original.

De ser ciertos estos trascendidos importaría un hecho sumamente grave en la medida que la institución, por encima de cualquier justificación, es la que debe contar con todos los documentos relacionados con los proyectos que ejecuta y todos ellos en original, es la única autorizada para extender copias debidamente fedateadas, por ello es inadmisible que se afirme que han encontrado solo copias simples de los proyectos gestionados.

Lo cierto es que el fiscal, Alejandro Gayoso Asencio, junto a otros cuatro fiscales y representantes de la Contraloría General de la Republica, fueron los que intervinieron las áreas de tesorería, infraestructura y liquidación de proyectos, a efectos de recabar y lacrar una documentación que servirá de mucho para los objetivos de la investigación y, esencialmente, a efectos de deslindar responsabilidades de los ex funcionarios.

Esta información ha trascendido a los medios de comunicación de la localidad por la incursión que hicieron los Fiscales el pasado viernes, sin embargo, a diferencia de otras acciones de fiscalización que ha realizado el organismo regional de control, en esta oportunidad no se dio a conocer los resultados de los hallazgos que aparentemente se han realizado y que tienen que ver con 19 obras que han sido licitadas y adjudicadas, que se han cancelado pero que no existen.

Esto no deja de llamar la atención en la medida que la Contraloría viene realizando un plausible trabajo de fiscalización en las entidades públicas, hace solo una semana ha motivado a la procuraduría municipal de la comuna provincial del Santa a realizar sendas denuncias penales contra ex funcionarios ediles por graves anomalías en el manejo de los recursos públicos.

Primero fue por una sobrevalorización detectada en la ejecución de la obra de mejoramiento de la avenida Camino real, en donde se advirtió que se cancelaron por metrados de pavimentación que en el lugar de los hechos no existen, un mecanismo manoseado por las empresas constructoras que terminan cobrando por lo que no hacen.

Una clara muestra de ello fue la obra de agua y alcantarillado que se ejecutó en la segunda etapa de la Urbanización Buenos Aires en la gestión del ex alcalde Juan Gasco Barreto, una obra financiada por el Ministerio de Vivienda y que debió ser supervisada por la comuna distrital pero que terminó siendo cancelada en su integridad cuando no se cumplieron con el cierre de las zanjas en calles conocidas, como el jirón Chimbote en el frontis de la Sub Región Pacífico y las calles aledañas que han quedado enterradas como un símbolo de lo que puede hacer la corrupción.

De la misma manera, el organismo de control ha puesto al descubierto malos manejos en los servicios de mantenimiento realizados por la comuna provincial en la última parte del año, los cuales han sido tramitados para su cancelación a pesar que no contaban con el requerimiento del área usuaria o en otros casos no han sido terminados pero aun así pretendían que se cancelen.

Por ello es que la Contraloría ha informado a la Municipalidad Provincial que revise esos expedientes y ha establecido la responsabilidad penal que alcanza a quienes se coludieron con las empresas que trataron de esquilmar una vez más el erario edil, a vista y paciencia de todos.

Así como esas anomalías, la Contraloría ha detectado muchas otras irregularidades en dependencias regionales que han sido expuestas públicamente a efectos que la población se encuentre debidamente informada respecto a la forma como funcionarios a los cuales se les otorgó la confianza para que manejen los caudales de la ciudad terminaron traicionando esa buena fe que depositaron en ellos.

Sin embargo, si la memoria no nos traiciona no hemos escuchado de la existencia de 19 obras fantasmas que han sido diligenciadas en la Sub Región Pacífico y que, a tenor de lo que se ha podido conocer tras la intervención de la Fiscalía, implica un nuevo escándalo en la medida que se han tramitado pagos sin que exista contraprestación, algo que solo se vio en las épocas de mentada red de corrupción de Ancash.

Afortunadamente ya el Ministerio Público ha tomado acciones respecto a esta denuncia, probablemente las autoridades darán a conocer los alcances de este nuevo combate legal más adelante y se detallen cuales fueron esas obras fantasmas así como el perjuicio que se ha irrogado a las arcas regionales, aun cuando lo más importante y lo que todos esperamos es saber quiénes son los involucrados en este nuevo escandalete que, aparentemente, jamás dejarán de formar parte de nuestra golpeada y maltratada administración regional, sea cual fuera el color o la camiseta de quienes llegan finalmente a colocarse al frente del sillón regional. Estaremos atentos a lo que representa este nuevo y gravísimo hallazgo.