Uno de los problemas más complicados y preocupantes en nuestra ciudad es el crecimiento demográfico, la expansión urbana informal que se viene generando por las constantes invasiones tanto en el cono norte como en el cono sur, especialmente en este sector en donde las tierras del proyecto especial Chinecas representan una presa especial y preferida para los traficantes de tierras.
Y con esa expansión urbana se generan nuevos problemas sociales para la ciudad, inseguridad, carencia de limpieza pública, falta de alumbrado, y, esencialmente, carencia absoluta de servicios de saneamiento.
Por ello es que las autoridades de turno no solo deben bregar por la prestación de servicios a los usuarios formales de la ciudad, más aun en este momento que las instalaciones están colapsadas y se llevan adelante proyectos de cambio integral de las matrices de agua y desagüe, sino que debe atender una necesidad que está latente, como son las carencias de los pueblos jóvenes y asentamientos humanos en formación.
Uno de estos proyectos ha sido tomado por el alcalde provincial Roberto Briceño Franco desde que accedió al cargo el pasado mes de enero y corresponde a un programa denominado “grandes ciudades” que promueve el Ministerio de Vivienda y Saneamiento, un proyecto que cuenta con un convenio firmado por el acalde Briceño para impulsar el saneamiento de los sectores más deprimidos y que es financiado integramente por el Ejecutivo pero que para que pueda tomar forma e implementarse, es decir, para la habilitación y formulación de expedientes, se requiere de la participación de las Municipalidades.
Y la gestión de Briceño Franco le puso especial interés, entendía que en Chimbote se ha generado un serio desfase en materia de saneamiento por el crecimiento de los pueblos en los últimos años, sea por necesidad de vivienda, sea por el descarado tráfico de tierras o por la indiferencia de las ex autoridades que permitieron que este problema se extienda a los extremos que ha llegado a la fecha.
Por ello es que el Municipio ha priorizado el proyecto de saneamiento para 11 pueblos del cono norte, ubicados en la zona de San Pedro, y 50 asentamientos de la zona sur, aquellos que se han denominado como 217 y 308 hectáreas de Chinecas.
La buena noticia que trajo el alcalde Roberto Briceño y el gerente municipal Jesús Rodríguez Fuentes es que el Ministerio de Vivienda ya lanzó a licitación el servicio de consultoría para la elaboración de los estudios de preinversión a nivel de perfil del megaproyecto de agua y desagüe que beneficiará a estos más de 60 pueblos jóvenes de Chimbote y Nuevo Chimbote
La convocatoria pública se ha iniciado el último 5 de junio por parte del Programa Nacional de Saneamiento Urbano y debe concluir el jueves 11 de julio con la entrega de la buena pro. El consultor ganador tendrá un plazo de 300 días calendario para elaborar los estudios de preinversión a nivel de perfil y una vez que estos sean aprobados, se deberá licitar la elaboración del expediente técnico para finalmente ejecutar la obra.
En realidad se trata de una gran noticia., es el punto de partida de una megaobra que busca beneficiar a miles de familias y cuyo objetivo es cubrir ese gran vacío que existe en todo el país respecto a los servicios básicos que requiere la gente, es una deuda que cobra muchas víctimas por las enfermedades que se cuelan por la falta de un adecuado servicio. El alcalde ha conseguido cerrar una gran gestión en el Ministerio de Vivienda, hay que aprovechar estas campañas en las que el gobierno central tiene la necesidad de cerrar las brechas al 100% para contribuir al fortalecimiento de la distribución de agua potable y disposición de las aguas servidas.
Es evidente que no se trata de un proyecto inmediato, por el contrario por su volumen y por la monumental inversión que representará se tiene que hacer por etapas, como la que ha comenzado que es la consultoría a efectos de elaborar el expediente técnico y el próximo año será la licitación pública a efectos de seleccionar a la empresa que proponga los mejores pergaminos para culminarla.
Es un gran paso, especialmente para sectores deprimidos que a la fecha deben vivir en condiciones realmente difíciles por a falta de saneamiento. Esperemos que nadie se atreva a poner obstáculos a tan ambicioso proyecto.
COMPLICANDO LAS COSAS
Cuando todo hacia pensar que las aguas se habían tranquilizado en el Mercado Modelo, que es el principal centro de abastos del centro urbano de Chimbote, tal parece que la secuela judicial de los enfrentamientos internos entre los comerciantes podría generar nuevas escaramuzas que no permiten a este establecimiento crecer, progresar y desarrollarse.
Ello porque un Juzgado Civil acaba de desestimar la medida cautelar que se le había otorgado a la nueva Presidenta de la Junta Directiva, Jessica Juarez y, de esta manera, reconoce a la Junta Directiva transitoria que encabeza Ulises Fernández, de tal suerte que todo lo que se había lanzado en el ultimo año regresa a fojas cero.
Retorna al mismos estadío que dejó la organización interna en vida el ex presidente Marcial Terrones Córdova, con el agravante que la nueva dirigencia ya se encontraba en los registros Públicos a punto de inscribir sus poderes y tomar las medidas de manera oficial como junta directiva plenamente reconocida.
Se desconocen las razones del Juzgado Civil, lo único que se ha podido recoger es que la anterior directiva ha retomado la administración v será ella la que defina como se organizarán más adelante, pues es evidente que lo que demanda la justicia es que la elección de nuevos dirigentes se haga dentro del marco de la ley.
Hay que confiar que los comerciantes procederán sin apresuramientos para ordenar la casa. Hay que tener en cuenta que a estas alturas muchos esperábamos que el viejo mercado modelo, aquel que esconde miles de anécdotas e historias de nuestros antepasados, sería a estas alturas una moderna galería luego de privatizarse. Nada se ha avanzado y por el contrario, estas resoluciones lo único que consiguen es complicar más las cosas.