Editorial

Editorial: ::: SORPRESIVO TRASLADO :::

Que duda cabe que la noticia de la última semana fue el intempestivo traslado del ex presidente regional César Álvarez Aguilar, del Penal de Piedras Gordas de Ancón, en donde viene cumpliendo las condenas que se le han impuesto, al establecimiento penal de Challapalca, en la jurisdicción de la sierra de Tacna, ubicado sobre los 4,800 metros sobre el nivel del mar.

Aun cuando dos días antes que se concretara la medida ya se había deslizado esa posibilidad luego que la Comisión de Justicia del Congreso de la República aprobara un acuerdo en este sentido, es decir, sugerir al Instituto Penal Penitenciario el traslado del ex titular de Ancash a un penal de máxima seguridad, nada hacía pensar que esa solicitud podría tener ese derrotero.

Ello porque el acuerdo de la comisión de justicia no es vinculante y se dio en el marco de una sesión en la que se buscaba deslindar responsabilidades en la fuga del delincuente Rubén Moreno Olivo (a) “Goro”, concretada luego de una ilegal excarcelación que hasta la fecha sigue en investigación.

La Comisión de Justicia, presidida por la congresista Yeni Vilcatoma de la Cruz, había recibido el testimonio de los titulares de los órganos involucrados en estos hechos, como el Poder Judicial el INPE y la Policía Nacional, además había recibido a Fiorella Nolasco Blas, la hija del asesinado ex consejero regional Ezequiel Nolasco Campos, quien fue la que puso en alerta a la propia administración de justicia de la desaparición de “Goro” de las audiencias del caso de su padre y de los registros del INPE.

Como casi todo el país, la comisión de justicia había llegado a la conclusión que la liberación de Rubén Moreno Olivo (a) “Goro” es producto de una componenda en la que existen muchos responsables, no solo porque se hicieron de la vista gorda con una condena de 25 años de cárcel que no le permitía ni siquiera salir al patio de una prisión, sino porque es risible que se fugue desde el recinto en el que purgaba arresto domiciliario pues se supone que está sujeto a una vigilancia permanente de la Policía.

Por ello es que en medio de las acusaciones y alegaciones, la comisión de justicia llegó a la conclusión que esta fuga ha sido promovida desde el mismo penal de Piedras Gordas, que existieron personajes que pusieron mucho de su parte para que ella se concretara y señalaron que ese personaje no puede ser otro que el ex presidente regional César Álvarez Aguilar, quien ya había intentado salir de la cárcel por esta vía de la revocatoria de la prisión preventiva por un arresto domiciliario.

En ese orden de ideas, la Comisión de Justicia consideró que si así estaban las cosas era pertinente que se adopten medidas mucho más drásticas y estrictas con respecto a estos reclusos que son capaces de perturbar la marcha procesal de los juicios orales, y, destacó la necesidad que Álvarez pueda ser trasladado a un penal de mayor seguridad, en donde no exista la menor posibilidad que los contactos con el exterior permitan a los recluidos tejer estrategias que termine perturbando la marcha procesal de los juicios que se siguen contra ellos y que están por llegar a su final.

Ello porque la comisión de justicia llegó a la conclusión que César Álvarez tiene mucho que ver en estas fugas y violaciones a la ley por parte de los integrantes de su cúpula, posición que no sabemos si es nueva o ya estaba planificada, fue ejecutada dos días después por el INPE en medio de estrictas medidas de seguridad.

Cuando los medios de comunicación lo advirtieron, Álvarez Aguilar ya se encontraba en Challapalca, hasta donde fue trasladado por vía terrestre en medio de celosas medidas de seguridad y en medio de un procedimiento que no tenía marcha atrás.

Se dice y afirma que esto no es más que una venganza de la legisladora Yeni Vilcatoma de la Cruz para uno de los líderes de una mafia que la persiguió, que la acosó y la obligó a renunciar al rol que tenía como fiscal anticorrupción.

Esto es cierto, es parte de la historia política de Chimbote, cuando la congresista Yeni Vilcatoma ni siquiera pensaba que iba a llegar a una curul parlamentaria y que su figura tendría protagonismo nacional, estaba a cargo de una fiscalía anticorrupción en nuestra ciudad.

Recordamos que era Fiscal Adjunta y había caído en sus manos el caso “La centralita”, en momentos en que los jueces vacilaban y ordenaban el archivo de las denuncias, allí apareció Yeni Viclastoma para demandar el deslinde necesario en las responsabilidades de los funcionarios, incluyendo César Álvarez,.

Fue entonces que desconocidos interceptaron a la Fiscal en una calle y lanzaron amenazas contra su vida en caso se empecine en investigar al llamado “número 1”, hecho que obligó a la magistrada a demandar la remisión de este caso a la Fiscalía de la Nación a efectos que se designe un fiscal ad hoc para esta carpeta.

Por entonces, hablamos del 2011 al 2012 nadie le daba pelota, por el contrario, su denuncia solo fue recogida por los medios independientes que batallábamos contra las conspiraciones de Álvarez y su gente, manteniéndose en este status hasta que se registró la caída de la cúpula de la corrupción en Áncash.

Fue entonces que las cosas variaron en la justicia, la fiscalía pidió el traslado de la competencia del caso La Centralita y de esta manera de opuso encausar un proceso que estaba condenado a archivarse con los “Fiscales comandos” que se ufanaban de mucho poder en aquellos aciagos años de Ancash.

Todo ello afloró en la comisión de justicia del congreso, la fuga de Goro, la inminente salida del sicario “colombiano” con arresto domiciliario, las pretensiones de libertad de Víctor López Padilla, obligan a adoptar medidas drásticas y una de ellas ha sido el traslado de César Álvarez al penal de Challapalca.

No sabemos si es justa o inhumana la medida, lo cierto es que la sociedad necesita defenderse y desde los Penales se promovían las acciones que se vienen emprendiendo en las calles para darle un sesgo a la situación  jurídica de César Alvarez y pretender colocarlo como una víctima de aparato estatal, cuando en realidad no puede ser agraviado de nada, es el gran responsable del descalabro se la región Áncash y del derroche y despilfarro de los millones de soles que ingresaron por concepto de Canon Minero que hoy están todos dispuestos a defender. Así de claras son las cosas.