Política

ACTUALIDAD Y POLÍTICA… ACTUALIDAD Y POLÍTICA…

DISCURSO

Nuevamente los abogados defensores del ex presidente regional César Álvarez Aguilar han comenzado a diseminar un nuevo repertorio con la finalidad de alentar a sus huestes a pensar que nada está dicho y escrito y que la posibilidad de verlo nuevamente en las calles es latente. En Huaraz el abogado Henry Hidalgo, quien es su asesor en esa parte de la región, ha señalado que en cuatro años el ex presidente regional estaría libre y dejaría las frías celdas del Penal en el que se encuentra y lo dice bajo el argumento que de todos los casos judicializados que están en giro ninguno superará los ocho años porque su patrocinado “tiene la suerte” que la Fiscalía haya solicitado penas bajísimas en todos ellos. Nos imaginamos que este letrado se refiere a los procesos de Huaraz, pues en Lima el ex titular de Áncash enfrenta procesos en los cuales se les pide penas de 30 y 35 años de cárcel como son los juicios por el crimen de Ezequiel Nolasco y La Centralita en los cuales, aparentemente, ya los da por superados. Sin embargo, lo que ha omitido o al parecer no sabe este abogado es que en la actual legislación penal las penas que se dictan a una persona en diferentes procesos ya no se refunden en la más grave como ocurría con el código procesal penal derogado sino que ahora ellas se van sumando en la medida que le dicten condenas en diferentes procesos. Por ejemplo hasta el momento, en la medida que la segunda condena de Álvarez sea confirmada (como aparentemente será por el fundamento que presentó la Juez) tiene 10 años y 3 meses de carcelería y aun faltan muchos otros procesos. El mismo abogado ha señalado que en Huaraz está defendiendo más de tres procesos penales, aquí en Chimbote tiene otros tantos  y en Lima los demás. Hasta ahora recordamos como los últimos meses del año pasado los abogados comenzaron a difundir la especie esa de la inminente liberación de su defendido y finalmente no ocurrió. Ahora comienzan a hacer lo mismo cuando, paradójicamente, las cosas están más complicadas que antes. Este es un psicosocial como en los tiempos en que tuvieron el poder.

DESCREDITO

“Detienen a venezolano que agredió con un cuchillo a compatriota”, este es el titular que leímos en los periódicos la semana pasada y, lamentablemente, es una constante en las noticias que se producen no solo en nuestra ciudad sino en todas aquellas ciudades en donde han migrado los ciudadanos de ese país que huyen de la dictadura de Nicolás Maduro. Lo peor es que estas noticias son repetitivas, hemos visto casos de parejas llaneras que terminan a los golpes y con detenciones, otros que han caído en las garras del delito y cometen delitos. La verdad es que no llegamos a entender cómo es que personas que han llegado de otros lares y piden o esperan la asistencia de una mano amiga, adopten conductas que no son tolerables y que lo único que consiguen es el descrédito de la mayoría de sus compatriotas que buscan una oportunidad en nuestro país, que han congeniado con mucha gente y que viven la fiesta en paz. Hasta ahora no se nos quita de la cabeza la agresión masiva que protagonizaron 15 venezolanos en Bellamar y que debió generar una reacción más drástica de las autoridades no solo del Ministerio Público sino de la Defensoría del Pueblo y la Subprefectura de Nuevo Chimbote que pudieron pedir a los Ministerios del Interior y de Justicia que se tramite la expulsión de esta gente belicosa para las cuales, definitivamente, no puede haber espacio en nuestra ciudad. Es realmente lamentable.

TEATRO

El regidor Luis Ortiz Gonzales, quien preside a comisión de Cultura de la Municipalidad Distrital de Nuevo Chimbote ha puesto el grito en el cielo porque acaban de aprobar una nueva ampliación del plazo de culminación de la obra del teatro Municipal para el mes de septiembre. El concejal no entiende como si la empresa constructora tenía como último plazo ya ampliado hasta el mes de abril, ahora se le permita seguir trabajando hasta setiembre. Bueno, debe recordar que uno de los que avaló este proyecto, que venía de la gestión anterior, fue él mismo y todos sabíamos cómo se hacían las cosas en ese periodo, para muchos ya era previsible todo esto. Pero no debería preocuparse porque cuando ocurren estas dilaciones la comuna está en la facultad de aplicar penalidades así que lo mejor es que presida una visita a la obra y demande un informe del ingeniero residente a efectos que se diga realmente en qué porcentaje de avance se encuentran, que cosa es lo que falta y que le muestren el expediente técnico para que consulte con los que saben. Veremos qué pasa.