LLUVIA
Todo indica que las autoridades no escarmientan pues apenas pasa una emergencia y se olvidan de las medidas que deben adoptar para prevenir los estragos de la naturaleza. Ello porque hace ya más de dos años atrás una intensa y persistente lluvia provocada por el “Niño Costero”, dejó secuelas bastante perjudiciales, no solo el bloque de carreteras sino que generó la suspensión de los principales servicios básicos, especialmente el caso del suministro de agua. Desde entonces se dijo que se deberían de adoptar medidas necesarias para prevenir que una nueva precipitación pueda generar secuelas perniciosas para los pobladores, especialmente, en aquellos sectores vulnerables de la ciudad como son los pueblos jóvenes y asentamientos humanos, en donde las viviendas se levantan en base a materiales recuperables y el agua fácilmente los supera. Sucede que desde el ya lejano “Niño Costero” no se ha registrado una nueva emergencia y ello ha sido suficiente para que las instituciones no hayan adoptado medidas preventivas mientras que las autoridades ni siquiera han conseguido rehabilitar los daños que dejaron las lluvias de entonces. Por ello es que la madrugada del sábado una persistente lluvia de casi seis horas dejó la ciudad anegada, a diferencia del “Niño Coistero” la precipitación no ha sido intensa de lo contrario los daños habrían similares a los registrados hace dos años. La lluvia prolongada pero de poca intensidad dejó las calles totalmente anegadas, los inmuebles en medio de charcos de agua y la situación se mantuvo así por varias horas. No existen planes de contingencia para retirar el agua de las principales calles, las propias empresas no han aprendido la lección, por ejemplo, el centro comercial megaplaza que concentra a una gran cantidad de gente durante todo el día, permanecía con charcos de agua en los estacionamientos de los techos hasta la noche, quiere decir, que ni se preocuparon en limpiar para recibir a sus clientes. Eso está muy mal y como fue sábado muchos se cruzaron de brazos. Afortunadamente la naturaleza está siendo condescendiente con los chimbotanos.
PROFUGO
Hay un sabio adagio que dice “el crimen no paga”, que nos describe el mal final que tienen aquellos que se enredan en actos delictivos y criminales. Es el caso de aquellos que cometen un grave delito y se fugan, desaparecen y piensan que nunca los van a capturar y que la secuela de sus hechos se olvidarán con el tiempo. Sin embargo, esto no funciona así, si cometiste el delito estarás viviendo al acecho de las autoridades y uno de estos casos lo ha experimentado Danilo Cruz Gonzáles, un despiadado sujeto que el año 2000 asesinó a su mujer cuando estaba embarazada de 8 meses, el crimen lo cometió junto a su amante Zarela Flores Zelada, con quien en esa ocasión se dieron a la fuga, la mujer fue condenada a 18 años de cárcel mientras que el sujeto fue condenado a 25 años de prisión, por lo que solo se requería que los atrapen y se vayan directo al penal, para ello el Ministerio de Justicia le puso precio a su cabeza. Hace tres años, la mujer fue detenida en Moyobamba, trasladada a Chimbote la confinaron en el Penal de Cambio Puente. Una delación permitió su captura y otro dato similar, de gente que sabía de sus antecedentes, permitió la captura la semana pasada de Danilo Cruz, también en Moyobamba. Esta pareja de criminales había fugado a esa zona de la selva en donde iniciaron una nueva vida y pensaron que todos se olvidarían de ellos. Ahora tendrán el tiempo suficiente de arrepentirse porque deberán cumplir sus condenas y ellas se extenderán, probablemente, hasta el final de sus días.
PERVERTIDOS
Han capturado a varios que operan con la misma modalidad, sin embargo, no escarmientan y apelan al mismo sistema de acoso sexual por las redes sociales. Se trata de Ralph Rubén Lescano de la Cruz de 31 años, un sujeto que fue intervenido por personal policial tras la denuncia del padre de la menor G.T.B.T (17) que un sujeto la venía acosando vía la red social Facebook proponiéndole tener relaciones sexuales a cambio de dinero, llegando incluso a enviarle fotos de sus partes íntimas. La Policía se hizo pasar por la menor y lo citaron en el sector Las Brisas hasta donde llegó el pervertido pensando que se había sacado la lotería y abusaría de una niña. Esta clase de gente se merece castigos diferenciados dentro del penal, pues a pesar que saben que esas acciones los llevan a la cárcel insisten en lo mismo. Ojalá se quede muchos años tras las rejas y no vuelva al acecho de las niñas en las calles.