Editorial

Editorial: ::: YA NO ES UNA PROMESA :::

La enorme maqueta que mostró el Gobernador Regional Juan Carlos Morillo Ulloa, la semana pasada en el marco de una concurrida conferencia de prensa, mostrando como quedará el nuevo y moderno hospital La Caleta, nos dejó una grata sensación de alivio porque por fin ya no nos harán mas el cuento de esa promesa electoral.

El Gobernador señaló en esta oportunidad que en 15 días se aprobará el expediente técnico del nuevo y moderno hospital La Caleta de Chimbote y antes de fin de año presentarán el expediente técnico concluido, con el fin de asegurar el presupuesto para la licitación de la obra a mediados del 2020.

Justamente, al mencionar este importante detalle relacionado con el financiamiento, reiteró que este asciende a 260 millones de soles y corre por cuenta del Gobierno Nacional tal como ya lo ha comprometido el Presidente Martín Vizcarra.

En realidad lo del presupuesto siempre estuvo en manos del Ministerio de Salud, lo que no existía era la voluntad de los gobernantes de Ancash para llevarlo adelante, estaba en manos de las autoridades regionales habilitar no solo el terreno donde se levantará sino el expediten técnico y los estudios que se requieren para poder asignarle el presupuesto y lanzar la licitación.

Y decimos que muchos no pudimos sino respirar con alivio en la medida que este es un antiguo proyecto que, infortunadamente, solo ha servido para bandera electoral de políticos trasnochados que jamás tuvieron la intención de llevarlo adelante porque eran conscientes que se trataba de un proyecto de gran envergadura y bastante complicado.

Quienes no olvidamos fácilmente esta clase de embustes politiqueros recordamos que este proyecto fue lanzado el año 2007, cuando el entonces Presidente Regional César Álvarez lo anunció en los albores de su escandalosa gestión, prometió que lo haría realidad y, por entonces, señalaba que se levantaría en el mismo terreno en donde se ubica sus actuales y colapsados instalaciones, es decir, frente a la playa La Caleta.

En realidad no sabemos si esto se hizo adrede o fue producto de la ignorancia de sus funcionarios de la normatividad vigente, pues ya para entonces estaba terminantemente prohibido construir hospitales a menos de 100 metros del mar, por lo que era evidente que esa propuesta no prosperaría.

Lamentablemente en esos tiempos se hacía todo lo que ordenaba Álvarez, aun cuando se lesione o infraccione la ley, por ello tuvieron el desparpajo de lanzar la consultoría en contubernio con las empresas que trabajaban para el empresario panameño Fortunato Cannan y se realizaron los estudios con estas indicaciones.

Fueron los tiempos de los audios aquellos en los que el ex ministro aprista Rómulo León fue grabado en conversaciones con un empresario brasileño y ofrecía las obras de Ancash, se ufanaba de “domar a la bestia” refriéndose a César Álvarez y se refería a los hospitales de Chimbote y Huaraz, así como Chinecas.

Finalmente se entregaron los consultorías de los hospitales a una empresa ligada al empresario panameño y la región quedó enganchada no solo en lo que concierne a los millonarios montos pactados, sino con un expediente que, ciertamente, no serviría más adelante.

Lamentablemente ya la consultoría estaba hecha, con la salida de Álvarez se comenzó a retomar el proyecto pero ya pensando en otro terreno, se formó una comisión de vecinos, el ex alcalde Julio Cortez ofreció comprar el terreno a cambio que el hospital le entregue al Municipio el inmueble que actualmente ocupa y se intentaron una serie de alternativas hasta que la propuesta de la comisión que encontró unos terrenos en Dos de Mayo fue aprobada por el Ministerio de Salud.

Desde entonces quienes sí hizo esfuerzos por sacar adelante este proyecto fue el ex gobernador Luis Gamarra que dejó todo listo para la compra del predio pero no pudo desenganchar el voluminoso expediente de la consultora y por ello ese trabajo se ha debido realizar durante todo este año.

Afortunadamente, el Gobernador Juan Carlos Morillo nos ha informado que este expediente ya está virtualmente listo, se debe entregar al Ministerio de Salud antes del 31 de este mes para los efectos que se cuente con el presupuesto y se pueda lanzar la licitación el primer trimestre del 2020.

Y esto ha sido posible porque uno de los primeros actos que hizo y firmó el gobernador Morillo al iniciar su gestión en enero de este año, fue negociar la compra del terreno y obtener una buena gestión, de tal suerte que ese paso fue fundamental para que al cierre de este 2019 se llegue, por lo menos, con toda la documentación en orden y con la última etapa del proceso de selección para ejecutarse.

No podemos cerrar el año con una mejor noticia que esta, la gestión de Morillo está demostrando que tiene la voluntad política de cerrar este proyecto con broche de oro, lo puso de manifiesto en la compra de terreno y lo hace ahora con la culminación del expediente y la presentación de una enorme maqueta que ya nos permite inferir lo que será este nuevo hospital.

Estamos hablando de una infraestructura que será de tipo II-2, constará de 6 pisos y será construido en un área total de 17 mil 858.31 m2 con aisladores sísmicos. Contará además, con consultorios externos, área de Emergencia, Hospitalización, un Centro Quirúrgico-Obstétrico, un área Quirúrgica, un área de Obstetricia y Neonatología.

La obra también contempla una Central de Esterilización y Equipos, Unidad de Cuidados Intensivos, Farmacia, Patología Clínica, Medicina Física y Rehabilitación, un auditorio, una cafetería y estacionamiento vehicular. Incluye equipamiento completo y la apertura de diversas especialidades médicas que ayudarán a mejorar la atención y proliferación de colas en la población chimbotana.

Ya muchos nos trasladamos imaginariamente a lo que se viene en el sector salud, pues al nuevo hospital La caleta se sumará el Hospital El progreso, el Hospital IV de Essalud, el policlínico de complejidad creciente que se ubicará en la urbanización Domus. A todos ellos se suman los proyectos que se vienen incorporando y aun están en ciernes como son los hospitales para Nepeña y Santa, lo que garantizará una atención de calidad en salud. Hay que reconocer que hay un avance efectivo este año y batir las almas cuando nos traen una maqueta que nos advierte que este proyecto ya no es una promesa.