PROTOCOLOS
Esta palabreja será la que estará de moda en los próximos meses y con la cual los peruanos debemos acostumbrarnos por un buen tiempo. Se trata de las medidas de seguridad que se debe adoptar en toda actividad, en toda oficina pública o privada luego que se levante la emergencia. Por ejemplo, en este momento se debate lo que pasará al transporte público, las autoridades han advertido que los vehículos colectivos y taxis deben acondicionar unas barreras de acrílico para separar al chofer y pasajeros, para mantener la distancia. Esto también implica que llevarán un pasajero menos y deberán contar con los equipos de protección personal como mascarillas, guantes y alcohol o alcohol en gel para desinfectarse cada vez que reciben los billetes o monedas del pasaje. Esto viene generando algunos reclamos de los transportistas, sin embargo, tienen que entender que es la realidad que nos toca vivir en esta pandemia. De la misma forma los establecimientos públicos y comercios deberán disponer medidas de desinfección de sus visitantes, deberán colocar señalizaciones para que el público mantenga la distancia y hasta en el saludo deben variar nuestras costumbres. Tienen que olvidarse del apretón de manos, de los abrazos y las muestras de cariño. Apenas un saludo con el codo es lo más cercano que habrá entre dos personas y lo más usual será saludar con el gesto de las manos. Hay que adecuarse a estos tiempos nefastos que nos ha traído la pandemia. No queda otra salida, sólo es cuestión de acostumbrarse.
PROGRESO
Ahora que se ha terminado con éxito la intervención del mercado La Perla, el alcalde provincial Roberto Briceño Franco espera que el Gobierno acelere su pedido para que se intervenga el mercado Progreso al haberse identificado que varios comerciantes padecen el virus y que se ha establecido que es uno de los focos infecciosos de la ciudad de Chimbote. Esto es cierto, se requiere la intervención del Estado porque las autoridades locales lo han clausurado hasta en dos oportunidades y los comerciantes se han resistido y volvieron a abrir las puertas rompiendo los sellos de seguridad que se dejaron en el inmueble. Hay que decirle basta a los arrebatos de ciertos personajes que han utilizado uno de los mercados más antiguos de la ciudad como su herramienta propagandística, al parecer con fines proselitistas. Que lastima
OTRO MÁS
Pero no sólo el mercado Progreso debe ser clausurado, hay otros que están en las mismas condiciones y que requieren ser intervenidos para conocer el grado de contaminación y riesgo que representan. Uno de ellos es el mercado Buenos Aires, cuya ampliación ha sido considerada dentro del programa de orden, control y vigilancia por el gobierno central, sin embargo, los vecinos de la zona esperan que se realice un tamizaje a todos los comerciantes porque se han registrado fallecimientos y no se sabe si fue por COVID. De todas maneras, se tiene que tener en cuenta que el de Buenos Aires es uno de los mercados más concurridos del distrito de Nuevo Chimbote, como tal tiene todas las características de un foco infeccioso, de allí que se tiene que despejar dudas, no solo por el bien de los miles de compradores que llegan a sus instalaciones, sino por la propia salud de los comerciantes que deben, a toda costa, evitar contagiarse porque hay muchos que pasan los 60 años y podrían verse afectados por la oscura ofensiva del virus. Hay que tomar todas las providencias, especialmente en este momento que las estadísticas nos dicen que no llegamos ni a la loma de la enfermedad, menos estaremos en la famosa “meseta”.