El premier Pedro Cateriano Bellido dijo anteayer en nuestra ciudad que el mensaje presidencial que el Jefe de Estado, Martin Vizcarra Cornejo debe pronunciar el día de hoy, pondrá énfasis en tres aspectos: continuar con firmeza la lucha contra la pandemia, la reactivación económica, y elecciones libres, neutrales y democráticas.
El presidente del consejo de ministros respondió de esta manera a las inquietudes de la prensa que en los últimos días ha venido, como es usual, especulando respecto a los temas que abordará el primer mandatario en el mensaje que, por mandato constitucional, debe pronunciar ante el pleno del congreso de la república
Claro, el Poder legislativo, como todas las instituciones y entidades del país, ha venido realizando sesiones virtuales pues siendo un hemiciclo que congrega a 120 parlamentarios, es imposible mantener un distanciamiento, más aun cuando en la primera parte de esta pandemia se convirtió en un foco infeccioso tras su instalación, de allí que asumimos que la sesión de hoy tendrá esas mismas características.
Hay que tener en cuenta que este mensaje presidencial tiene una característica especial y es que se deberá realizar en medio de la pandemia del nuevo coronavirus, la alerta mundial que nos ha llevado al confinamiento, que no solo ha cobrado miles de vidas, sino que ha llevado al aparato productivo y la economía mundial casi al colapso.
Los daños que viene dejando esta pandemia son incalculables, de allí que el primer punto de agenda del mensaje de hoy será, precisamente, el relacionado con esta crisis sanitaria en la cual nuestro país, según lo expresan las cifras, no la pasa nada viene.
Y es que el presidente le debe una explicación al país, debe buscar la manera de explicar cómo es que habiendo decretado una cuarentena prematura, al haber dispuesto el confinamiento mucho antes que lo hicieran otros países, presenta las peores cifras respecto al incremento de contagios y número de muertos.
Si se afirma que el acuartelamiento de los ciudadanos es la herramienta más eficaz en una estrategiaÂÂ ante un virus tan agresivo como el que padecemos, entonces alguien debe explicar porque nuestro país se ubica en el segundo lugar de contagios y muertes en Sudamérica y es el quinto en todo el mundo.
Algo tuvo que fallar, al promediar el tercer mes de cuarentena y siendo el escenario sumamente lúgubre para el país, un grueso sector de la población agobiada por la falencia económica decidió salir a las calles, los comerciantes informales inundaron las calles del centro de Lima y si había ambulantes es porque existía gente a quien vender.
Esta actitud reacia de una parte de la población ha obligado al gobierno a adelantar el inicio en la reanudación de algunas actividades económicas, disponer el levantamiento de la cuarentena en todo el país con excepción de siete regiones, entre las cuales lamentablemente incluyeron a Ancash, y con ello el índice de leve declive de las cifras de contagios y fallecidos comenzaron a elevarse nuevamente.
Por ello es que ha llegado el momento de enfrentar a esta pandemia con otras estrategias, ya de nada vale que la gente mantenga una cuarentena de manera religiosa cuando existen miles que no lo hacen, cuando los niveles de contagios han llegado a extremos que hacen peligrar el enorme esfuerzo que ha hecho el gobierno para implementar los hospitales de todo el país.
Ha llegado el momento de pasarle la responsabilidad del cuidado y la prevención a la gente, especialmente a esos irresponsables que no acataron la cuarentena y han llevado al país a un escenario de guerra, ya no cabe duda que ha llegado el momento de invertir las cosas de soltar las amarras de la cuarenta y mantener las ataduras solo en las actividades que impliquen tugurización y congestión de personas. Esas no podrán reanudarse.
De allí que el mensaje se centrará en este aspecto, no sabemos qué cosas nuevas pueden implicar a nuestro puerto, los chimbotanos ya esperamos demasiado, requerimos la via de Evitamiento, demandamos la modernización del Puerto, urgimos de la ejecución de Chinecas, empero, somos conscientes que si antes de la pandemia no se tocaron estos temas, menos lo podrán tomar en cuenta ahora.
Particularmente, existe poca expectativa en este mensaje presidencial, creemos que la problemática de Chimbote no se tocará ni siquiera tangencialmente, inclusive, a pesar que existe otra problemática ambiental pendiente como los contratos petroleros. En consecuencia, solo quedará seguir esperando, quizás un años más.