Editorial

Editorial: ::: LOS CULPABLES :::

En la última conferencia de prensa ofrecida por el presidente de la república, Martín Vizcarra Cornejo, anunció que el ministerio del interior ha iniciado una investigación contra el personal policial que intervino en el Restobar de la urbanización Los olivos el pasado sábado 22 de agosto, ña misma que se tornó violenta y se registró la muerte de 13 personas por asfixia.

El jefe de estado termino su alocución refiriéndose a un tema realmente penoso pero que fue argumento para poner en tela de juicio la actitud irresponsable de mucha gente que es la que ha llevado a nuestro país a niveles impresionantes de contagio y de muertes, lo que en su oportunidad el primer mandatario censuró de manera drástica.

Sin embargo, en esta oportunidad, el presidente se refirió el tema para exigir una explicación al Ministro del Interior sobre las graves consecuencias de este hecho a la luz de los vídeos de las cámaras de seguridad del local en la que se apreciaría no solo una intervención que no respetó los protocolos, sino que el jefe de operativo habría faltado a la verdad respecto a los incidentes.

Estos cuestionamientos están relacionados con la famosa puerta de la discoteca que no pudo ser abierta y que generó la tragedia porque las mujeres que habían descendido por las escaleras murieron aplastadas por los que desesperadamente bajaron luego.

El personal policial había manifestado que la puerta se cerró cuando los intervenidos salieron de manera abrupta y provocaron que se generara un cuello de botella que afecto, inclusive, a dos efectivos policiales que quedaron atrapados clon los concurrentes.

Sin embargo, as cámaras de video pudieron al descubierto que la puerta nunca estuvo abierta., existía un efectivo policial que estaba en ella y se mantenía cerrada, mientras que en otros momentos se aprecia a algunos efecticos que se encontraban rebuscando en el bar de atención que se dice que era la caja registradora.

Pero, además de ello, se había detectado que el personal policial había editado las imágenes de estas cámaras de seguridad, había retirado aquellas que los co0mprometían y que pusieron al descubierto estos cuestionamientos.

Es lamentable que a estas alturas se ponga en tela de juicio el comportamiento de los custodios, más aun si es que existiera algún n hecho irregular como la pretensión de borra imágenes con la finalidad de evitar algunas contradicciones en sus informes, ello deberá ser materia de sanción, empero, no se puede arrinconar o arrimar responsabilidades a quienes solo se encargan de poner orden.

No se puede soslayar que la responsabilidad de esta tragedia no recae sobre los efectivos policiales, ella es secuela de una actitud insensata de gente que acude a una discoteca en medio de una pandemia, que tiene la osadía de concurrir a eventos que estan prohbidos.

La mayor responsabilidad recae sobre el promotor de este evento que solo busca el lucro a sabiendas que promover una baile de estas características solo ayuda a expandir el virus en momentos que el país se debate en una crisis.

La mayor responsabilidad recae sobre los propietarios de un inmueble que lo alquilan a sabiendas que en aquel no se pueden realizar actividades de este tipo mientras nos hallamos en emergencia, recae sobre funcionarios municipales que no controlan el funcionamiento de estos locales.

Una de las razones por las que se produce esta tragedia es el local bailable que solo cuenta con una puerta de escape y cuyo acceso es una agosta escalera que no es aceptable de ninguna manera para una discoteca.

¡no advirtieron esto mucho antes los funcionarios de la municipalidad de Los Olivos? ¿Cómo es posible que se pueda hablar siquiera de una licencia de funcionamiento cuando el local es inadecuado? Hay que dejarse de tonterías y está buscando culpables en una Policía que lo único que hace es exponer su salud para controlar que los irresponsable son solo expandan el virus sino que debe protegernos a las mayorías. Todos saben quiénes son los culpables de esta tragedia, no busquemos cabezas de turcos para salvar a ministros que se muestran incapaces de sustentar la labor delos custodios.